Pese a poner todos los ingredientes en la olla, el Valencia no supo cocinarse la victoria y tendrá que afrontar la última jornada de la fase de grupos con la obligación de ganar en Amsterdam para superar el primer corte de la Liga de Campeones dependiendo de sí mismo. Con la miel en los labios, el empate fue a nivel emocional otro canto a la épica, si bien el arrebato que sí que sirvió para golear al Lille no le alcanzó para tumbar a un Chelsea que se escapó vivo de Mestalla. Estuvo realmente lejos de ser fiero el conjunto inglés, vulnerable en su área y tan sólo netamente superior en el centro del campo, una zona que los de Celades terminaron sorteando para convertir el partido en una sucesión de transiciones. Una montaña rusa que dejó al equipo sin aliento y a Gayá, la estampa del intento de gesta, al borde de una lipotimia.

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Gayà sale del campo en camilla por una lipotimia.

Habiéndolos fallado de todas las guisas, los dos goles llegaron casi sin querer. El primero lo hizo Soler, que deslumbrado por los focos ni supo con qué pierna le había dado. Y el segundo Wass, reconvertido a lateral para transformar en remate un centro con el que logró cambiar el contexto e inflamar el ambiente. No se rindió nunca el Valencia, ni siquiera cuando parecía en la lona, pero tampoco supo como meterle mano a un rival al que con algo más de colmillo habría derrotado ampliamente sin necesidad de pasarle con juego por encima. A lomos de una propuesta de ida y vuelta, en la disyuntiva entre si conservar el empate o lanzarse a tumba abierta, la decisión final de Celades desde la banda fue lo segundo. Nuevamente sin término medio, Cillessen obró otro milagro al borde del descuento y a partir de ahí de los siete minutos extras no se desperdició ninguno.

Más allá de los altibajos propios de un partido de enjundia y alternativas, el Valencia dio la talla en condiciones adversas. Sin embargo, no fue diferencial en ninguna de las áreas. En la contraria por no acertar y en la propia por dejarse generar otro sinfín de oportunidades. Kepa, un guardameta nervioso y estático, se fue del partido parándole un penalti a Parejo y viendo como casi no tuvo que hacer nada en el resto de situaciones bajo palos. Falló Maxi a solas y lo hizo con una vaselina a puerta descubierta Rodrigo, autor de la asistencia en el 1-0 pero indefendible en la definición tras otra pifia inexplicable. Con más calidad para marcar diferencias habría sido una victoria hasta holgada sin necesidad de romper a jugar ni de corregir el resto de errores conocidos.

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Los momentos clave del partido Valencia - Chelsea

Por si no estuviese claro lo condicionado que se encontraba el once titular, nada más arrancar Williams le ganó la espalda a Jaume Costa, una escena que contribuyó a que durante el primer cuarto de hora cundiera el pavor cada vez que el rival, que para variar fue el que entró mejor, merodeaba el área. Con Pulisic y Kovacic a los mandos, el Chelsea traspasó líneas como el cuchillo la mantequilla, por lo que con la batalla del centro del campo perdida la siguiente fue ya dentro del área. La portería volvió a ser un día más un paredón al que llegaron disparos por todos los lados, así que era una cuestión de tiempo más que de acierto que a Cillessen lo hirieran.

Aun con Gabriel magullado más un Garay al pie del cañón pero infiltrado, el Valencia fue capaz de defender bien los espacios cortos y allí donde no llegaron los centrales lo hizo el portero. El holandés, con su costumbre de alternar las de cal con las de arena, salvó dos goles antes del descanso, sobre todo uno a Abraham, si bien pudo hacer más en el que Kovacic le coló por su palo. Otra vez, como en el Villamarín, el equipo llegaba al descanso pidiendo a gritos una tregua. Y otra vez, también como hace apenas cuatro días, la gestión de la ventaja fue un desatre. Ni dos minutos duró la enorme alegría del gol de Soler, diluida como un azucarillo.

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Valencia CF - Chelsea: Las mejores fotos del partido

El Valencia tardó un eterno cuarto de hora en entrar pero, de menos a más, lo cierto es que sin necesidad de rozar la excelencia ya en la primera parte le alcanzó para generar situaciones manifiestas de gol ante un Chelsea que atacaba mejor que defendía. Lástima que Maxi no tuviera el día. Descoordinado en el remate en la mejor jugada hasta el 1-0, nacida de los pies diferenciales de Parejo y madurada en los de Rodrigo, el uruguayo dejó pasar un balón en boca de gol mientras escogía pierna para el remate. Kepa, notable bajo palos pero una escopeta de feria iniciando el juego de su equipo, le sacó la siguiente con una magnífica parada. El gol llegaría en un remate mucho peor que ese. Rodrigo metió un balón tan tenso que la cuestión era rematarlo como fuese para que acabase dentro, así que aunque pifiado, el toque de Soler terminó en la red.

A prueba de resiliencia, lo primero que se encontró el Valencia tras el descanso fue otro bofetón, aunque en diferido. Una vez chequeada la jugada, el VAR validó el gol de Pulisic en uno de esos dibujos de escuadra y cartabón. Sin embargo, a falta de media hora, en un punto de inflexión entre tocar a rebato o quedarse patas arriba después del penalti, el Valencia tiró de épica, su traje favorito. Se rompió Jaume, reapareció Coquelin, a tope para los últimos minutos, y con el nuevo dibujo Celades volvió a la moneda al aire. Y no fue cara ni cruz. Cayó de canto, así que a por la victoria en Amsterdam para estar en octavos.Ficha técnica:

[if IE 9]><link rel='stylesheet' type='text/css' href='https://secure.widget.cloud.opta.net/v3/css/v3.football.opta-widgets.css' media='screen'/><![endif][if IE 8]><link rel='stylesheet' type='text/css' href='https://secure.widget.cloud.opta.net/v3/css/v3.football.opta-widgets.css' media='screen'/><![endif]2. Valencia: Cillessen, Jaume Costa (Gameiro, m.67), Garay, Gabriel Paulista, Gayà; Wass, Parejo, Carlos Soler (Kang In Lee, m.78); Ferran (Coquelin, m.74), Maxi Gómez y Rodrigo.

2. Chelsea: Kepa, James, Christensen, Zouma, Azpilicueta; Kovacic, Kanté, Jorginho (Enerson, m.72); Willian (Mount, m.80), Abraham (Batshuayi, m.46) y Pulisic.

Goles: 1-0,m.40: Carlos Soler. 1-1, m.42: Kovacevic. 1-2, m.50: Pulisic. 2-2, m.82: Wass.

Árbitro: Félix Zwayer (GER). Amonestó por el Valencia a Wass, Gabriel Paulista y Garay, y por el Chelsea a Jorginho, Kanté, Kepa y Azpilicueta.

Incidencias: Partido correspondiente a la quinta jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones, disputado en Mestalla ante 43.486 espectadores.