Anil Murthy no tiene en mente dimitir de su cargo en el Valencia CF ni Peter Lim intención de desprenderse al menos a corto plazo de la propiedad de las acciones, según explicó el presidente a todos los empleados del club reunidos este martes en el estadio de Mestalla. La conclusión es que, para Murthy, todo es mentira. Como el programa de Risto Mejide. Les explicó que no hagan caso de una «campaña de desprestigio» que hay en la calle y en las redes sociales contra él mismo y el máximo accionista, y que el proyecto sigue adelante a pesar de la salida del mismo de Marcelino García y el jefe del área técnica Pablo Longoria en las últimas semanas. Aunque, en este sentido, tampoco dio ninguna información de en qué consiste o hacia dónde va ese proyecto.

Fue una cita realmente excepcional, hacía años que el club no reunía a todos sus empleados con la excepción de las comidas o cenas de Navidad, insisten en que estaba programada desde hace tiempo aunque al final ha llegado en un momento de gran tensión, después de producirse determinados hechos que han generado un importante desgaste a la entidad y sus máximos representantes a nivel social. Como la revelación de Santiago Cañizares, quien acusó a Anil Murthy de frenar la colaboración del Valencia CF con una iniciativa en beneficio de la investigación contra el cáncer infantil solo por sus críticas al despido de Marcelino, o los gestos del propio presidente desde el palco hacia los aficionados el pasado sábado en Mestalla, en pleno partido entre el Valencia y el Deportivo Alavés.

Murthy, que llegó al estadio escoltado por sus más estrechos colabores, Sean Bai y Teo Swei Wei, reunió por la mañana en Mestalla a los empleados del Valencia CF. Acudieron todos con excepción del cuerpo técnico del primer equipo y los jugadores, la mayoría estaban entrenando en la ciudad deportiva y otros con sus respectivas selecciones. Les reprersentaba el 'Team Manager', Voro González. También algunos técnicos y equipos de la escuela que trabajaban en ese momento. Lo que hizo fue lanzar un mensaje de unidad y tranquilidad después de las semanas convulsas que vive la entidad desde el desencuentro entre Mateu Alemany y Marcelino con la propiedad, que acabó con la destitución del entrenador después de solo tres jornadas de LaLiga. La reunión informativa apenas duró una media hora, quizá algo menos, y en la misma el presidente denunció esa campaña de desprestigio que se ha desatado contra el propietario, Peter Lim, que considera también contra el Valencia Club de Fútbol. De autocrítica, de reconocer errores cometidos, nada de nada.

Habló de las muchas mentiras que según su forma de ver se están contando sobre la gestión del Valencia CF, de las que no se libra ni el propio Cañizares, porque Murphy califica de 'fake news' muchas de las cosas que se han contado sobre el polémico asunto de la no participación del Valencia CF en esa iniciativa solidaria. Llegó a decir además que a partir de ahora él mismo les tendrá informado de las cosas que pasen y les «contará la verdad».

Al final de la reunión, Anil abrió un turno de preguntas y se prestó voluntariamente a contestar a todas las cuestiones o inquietudes de sus trabajadores. Sin embargo, a continuación nadie pidió la palabra, dando paso a un significativo silencio sepulcral que ponía el punto y final a esta atípica reunión informativa a la que también estaba citado el director general Mateu Alemany, así como todos los responsables de área. Nadie hizo declaraciones a la salida del estadio.