El Valencia CF no tira la toalla y se mantiene en la búsqueda de un defensa central para cubrir la baja de Ezequiel Garay, objetivo difícil por las limitaciones que establece la normativa en estos casos pero también las que se impone el propio club, económicas y deportivas. Todavía hay algunos días por delante para rastrear y dar con la solución, aunque tampoco se puede descartar la opción de que no llegue ningún jugador y al final Celades se tenga que apañar con lo que tiene.

Los diez días que han transcurrido desde la grave lesión del argentino han servido para comprobar la realidad del mercado. Sin posibilidad de transferencia internacional con el mercado de fichajes cerrado, las opciones se reducen solo a futbolistas que militan en el fútbol español, primera y segunda división fundamentalmente, pero en el club hay desde el primer momento muchas dudas que con el paso de los días el mercado ha ido confirmando.

De entrada, ningún club regala a estas alturas a uno de sus jugadores importantes, del nivel que está buscando el Valencia CF, un equipo que como se ha visto tiene serios problemas en defensa. Cualquier central que pueda dar la talla y ser interesante tiene una cláusula que en estos momentos el club no puede asumir, cantidades siempre por encima de 20 millones de euros.

Si baja a un segundo escalón, terceros centrales o que estén contando con pocos minutos en sus equipos, se ve en la situación de tener que pagar un sobreprecio por jugadores que al final le servirían para cubrir el expediente en estos cuatro meses, pero que no entrarían en el proyecto para la próxima temporada. Lo que se entiende como un 'parche' pero a precio de oro. Situaciones de este tipo ya se ha encontrado varias en estos días y se puede decir que el Valencia solo daría un paso al frente en este sentido para firmar un jugador si tiene muy claro que el próximo verano podría venderlo sin que ello suponga una pérdida relevante.

Mientras, César Sánchez está metido de lleno en la tarea de encontrar una solución viable y que ofrezca las mínimas garantías al entrenador, aunque el tiempo para firmar no es ilimitado. El Valencia CF, aunque en el caso de que se presentara la solución solicitaría una ampliación del plazo, tiene solo esta semana para dar de alta un nuevo futbolista en la plantilla, antes de que caduque la autorización especial por la lesión de larga duración de Garay.