Hoy, entrenador del Catania en la Serie C, ayer máximo artillero de la Serie A (2004/05) y exjugador, entre tantos equipos, de Atalanta y Valencia. De hecho, fue precisamente Bérgamo la ciudad que Cristiano Lucarelli dejó para vestir la camiseta de los valencianistas en la 1998/1999. Fue su primera experiencia en el extranjero, una temporada importante y ganadora (Copa del Rey), pero condicionada por una grave lesión en la rodilla que no le permitió jugar más de 20 partidos con 3 goles en total. Sin embargo, el histórico delantero italiano no puede olvidar el año pasado con el ‘mister’ Claudio Ranieri, con su gran amigo Amedeo Carboni y con campeones del nivel de Claudio López o Santiago Cañizares. Tal y como contó en exclusiva para SUPER en la previa del duelo Atalanta-Valencia, hablando obviamente también de este partidazo de Champions League.

¿Qué recuerdo tiene de la Liga y, más precisamente, del Valencia?

Tengo recuerdos positivos y bonitos de esa temporada. Fue una experiencia muy importante para mi desarrollo como futbolista y también como hombre. Si no me hubiera lesionado de la rodilla, me habría quedado seguramente más tiempo en Valencia. Me gustaría volver atrás para jugar dos o tres temporadas con los murciélagos.

El Valencia representó su primera aventura en el extranjero, ¿cómo fue dejar la ‘bella Italia’ para cambiar totalmente de aires?

Fui uno de los primeros italianos que decidieron ir a jugar fuera de nuestro país, tenía el hambre de probar algo nuevo y no hubiera podido tomar una mejor decisión para mi carrera. De hecho, en València descubrí una ciudad preciosa, un club importante y bien estructurado y conseguí adaptarme en muy poco tiempo. La presencia del entrenador Claudio Ranieri y del otro italiano Amedeo Carboni fue sin duda una gran ventaja.

¿Era el mismo Carboni el compañero con el que se llevaba mejor?

Me llevaba bien con todos. En el Valencia CF encontré un gran vestuario, muy abierto y acogedor ya a partir del primer día. Fue claramente más fácil conectar enseguida con Carboni o con otros jugadores que, como yo, habían llegado de la Serie A: pienso por ejemplo en Jocelyn Angloma o en Joachim Björklund. Tenía una muy buena relación también con nuestro súper arquero Santiago Cañizares.

¿Qué sensaciones le daba jugar en uno de los estadios más calientes de toda Europa?

Fue un sueño cumplido, la verdad. El Mestalla me daba siempre buenas sensaciones, nuestra afición era muy caliente y repito siempre que en València se vive el fútbol con la misma pasión que hay en Italia. Tenía mucha curiosidad de jugar un campeonato que hasta ese momento había visto solo en la televisión y los valencianos no me defraudaron para nada. Con su gran aliento, domingo tras domingo, en la Liga como en Europa.

Un aliento que pronto conocerá en primera persona también la Atalanta... ¿A quién considera favorito en estos octavos de Champions?

Hablamos de dos equipos de calidad, no es fácil decir quién es el favorito para pasar de ronda. Puedo deciros que la Atalanta es sin duda un cliente muy incómodo para el Valencia, sobre todo en un doble enfrentamiento y en 180 minutos de juego. El conjunto de Bérgamo no tiene nada que perder y está animado por una ilusión infinita como vimos en su gran remontada en la fase de grupos.

Este doble enfrentamiento empieza esta noche en San Siro, ¿jugar la vuelta en casa será una ventaja para el equipo de Celades?

No creo, lo digo con toda sinceridad. La Atalanta juega siempre de la misma manera, en su estadio y afuera. Le da igual el rival o el lugar, porque Gian Piero Gasperini en estos años construyó un equipazo con una filosofia y un ADN propios. Sobre el papel sería una ventaja poder jugar la vuelta en casa, eso sí, pero no contra esta Atalanta. Los nerazzurri no modificarán nada de nada, en San Siro como en el Mestalla. Y el Valencia tendrá que aprovechar justo este factor.

¿Cuál es la mejor arma de la Atalanta?

El ataque, sin duda alguna. Hay pocos equipos, en toda Europa, que tienen en la misma plantilla talentos ofensivos del calibre de Ilicic, Duván Zapata, Luis Muriel, Papu Gómez... Sin olvidarse de los laterales. Para salir vivo de Milán, el Valencia tendrá que estar concentrado durante 95 minutos esta noche: no puede dejarle demasiado espacio a los nerazzurri, es peligroso.

Con muchos problemas en la defensa, el equipo de Celades tendrá que prescindir también de los protagonistas más esperados en Italia: Florenzi y Piccini...

Es una lástima, hablamos de dos futbolistas de alto nivel que habrían seguramente podido ayudar al Valencia en este gran reto, incluso porque se juega en Italia. En particular, la reciente llegada de Alessandro Florenzi fue un fichaje top: un lateral completo con experiencia internacional y personalidad. Espero que pueda hacer un buen camino en mi exequipo: ¡mucha suerte a Alessandro y al Valencia para el partido! Estoy convencido de que vamos a ver un auténtico show de fútbol.