Han tenido que pasar siete meses de esta temporada 2019/20 para que Toni Lato pueda disputar su primer partido oficial, salvando los dos que jugó con el filial del PSV. El lateral de La Pobla de Vallbona se estrenó este domingo en el once titular de Osasuna, donde había recalado en el mes de enero después de una experiencia nefasta en Holanda, tanto para él como para el Valencia, que había cedido al futbolista el pasado verano.

Pese a la derrota final en el Sánchez Pizjuán, con un gol de Youssef En-Nesyri en el minuto 93, allí parece haber acabado el calvario de temporada para Lato, que por primera vez entró en los planes de Jagoba Arrasate después de superar una lesión muscular. Con su larga inactividad en el PSV y su pase a Osasuna, el jugador acusó el cambio y se lesionó en los primeros entrenamientos. En Sevilla volvió a sentir la sensación de jugar, lo hizo además en una posición más adelantada de lo habitual, como interior izquierdo por delante de Estupiñán, que actuó de lateral. En el minuto 79, tras el gol de Roberto Torres que significaba el empate a dos, fue sustituído por Rubén García.

Lato, que está cedido hasta final de temporada y tiene contrato con el Valencia CF hasta 2023, vuelve a sonreir después de atravesar los peores meses de su carrera deportiva. Van Bommel, técnico del PSV, le condenó al ostracismo con solo un minuto oficial en cuatro meses.Antes de ser destituido a finales de noviembre, el técnico llegó a justificar su decisión diciendo públicamente que “en este momento no pensamos que sea lo suficientemente bueno”. Para entonces, el lateral ya había tomado la decisión de cambiar de equipo en el mercado de invierno y el Valencia le buscaba a través de Jorge López otro destino en LaLiga, que encontró rápidamente en Osasuna. De aquí a final de temporada Lato quiere recuperar todo el tiempo perdido.