Unai Emery, entrenador del Valencia CF, ha realizado una amplia entrevista para el 'Daily Mail' desde València, donde pasa el confinamiento y desde donde medita sobre el destino de su próximo banquillo. El técnico vasco cuenta detalladamente cómo transcurrió su etapa en el Arsenal, club en el que no sintió "la protección" que tuvo "en los otros clubes" que ha entrenado. PSG, Sevilla, Spartak de Moscú, Almería y Lorca, además de la entidad de Mestalla.

El entrenador de 48 años confiesa que durante su etapa en el club 'gunner' a Mesut Özil frente a un vestuario en el que se apoderó el desgobierno tras la salida de los cuatro capitanes: Ramsey, Cech, Koscielny y Monreal. Pese a todo, Unai, que agradece la ayuda que tuvo en el pasado de hombres como Monchi o Nasser Al-Khelaifi, no descarta un regreso a la Premier League por la pasión y la identidad con la que se vive el fútbol.

En una de sus primeras respuestas Unai Emery deja claro el perfil de club que busca para la próxima temporada, una entidad en la que se sienta totalmente respaldado en sus decisiones respecto al vestuario o frente a la crítica que en momentos puntuales pueda levantarse entre los aficionados. Sobre un periplo de 18 meses que finalmente falló en el Emirates Stadium, asegura: "Cuando los resultados fallaron y la gente comenzó a criticar, nadie dentro del club supo como protegerme. Dirían, 'sí, Unai, estamos contigo, pero ellos no fueron capaces de hacerlo ante los fans y el vestuario".

Monchi pudo acompañarle en los gunners

"En todos los clubes en los que he estado prácticamente siempre tuve protección", añade mencionando como el director deportivo del Sevilla, Monchi, pudo acompañarle en el Arsenal antes de certificar su regreso a la entidad de Nervión. "En el PSG el presidente Nasser Al-Khelaifi me protegió mucho, en el Arsenal eche de menos que me protegieran más... El club me contrató como técnico y tenían a Iván Gazidis, Raúl Sanllehi, después a Edu y tuve que confiar en que hacían bien su trabajo mientras me concentraba en el mío, los jugadores y los entrenamientos", indica Emery.

"Quedé a merced de los resultados y con errores que se habían cometido antes. Lógicamente, no comenté nada pero me sentí solo. Quizá fue porque venían de una era en la que Wenger lo hacía todo, pero el Arsenal todavía no sabe cómo hacerlo".

Uno de los principales problemas con los que se topó Unai Emery durante año y medio en el Arsenal fue la falta de liderazgo en el vestuario. En ese aspecto, el conflicto tuvo especialmente un nombre: Mesut Özil. "Hice todo lo posible para ayudarlo. A lo largo de mi carrera, los jugadores talentosos han sido mis favoritos y han jugado a su mejor nivel, o cerca, conmigo... Siempre fui positivo para que se involucrara, pero la actitud que adoptó y sus niveles de compromiso, bueno, no fueron suficientes", dice.

"Uno de los capitanes podría haber sido Özil, pero el vestuario no quería que fuera el capitán. Su nivel de compromiso no era el de quien merece ser capitán, y eso no fue lo que decidí, eso fue lo que decidieron los jugadores", añade el técnico, que desvela también en la entrevista su deseo de haber fichado a Zaha, jugador del Crystal Palace con el que llegó a reunirse personalmente, en vez de Pépé, por quien se decidió el club. "Pépé es un gran jugador, pero necesitaba tiempo de adaptación a una liga que aún no conocía".

Dispuesto a regresar a Inglaterra

Pese a la experiencia en el Arsenal, ¿Emery volvería a entrenar en la Premier League? "He disfrutado mucho en Inglaterra Si vuelvo a Inglaterra sería lleno de entusiasmo. Creo que es una liga magnífica. Hay un sentido de identidad del aficionado con su equipo muy profundo que no se ve en ningún otro lado", responde.

Unai Emery junto al CEO del Arsenal, Ivan Gazidis, el día de su llegada al club londinense en mayo de 2018

Despedido en noviembre de 2019 del Arsenal, la crítica contra el entrenador fue despiadada en los últimos tiempos al frente del equipo. Incluso después, hasta su ex pareja en Inglaterra apareció en la prensa para comentar que Emery le dijo que lo "echaron" del Arsenal por culpa de ella. Sacha Wright confesó que el técnico la había llamado "bruja blanca" por haberle traído mala suerte en el banquillo del club de Londres.

Con los malos resultados, su pronunciación del inglés también terminó siendo un obstáculo para Emery, blanco de burlas estúpidas y no justificadas por su acento vasco a la hora de responder a los periodistas. "El segundo año mi inglés era mejor, pero cuando vas a la sala de prensa y hay diez preguntas sobre por qué el equipo no hace las cosas bien, puedo contestar las dos primeras y en las ocho siguientes digo lo mismo. No tenía un vocabulario profundo", explica.

El 'good ebening' de Unai

"Obviamente, no soy inglés, pero siempre digo lo mismo: En España al que amábamos escuchar. Nunca habló un español perfecto, sin embargo, aceptábamos y nos encantaba su forma de hablar". Emery siente que en Inglaterra no ha tenido esa comprensión. "Como cuando decía 'good ebening', vale debería ser 'good evening' (buenas noches). Necesitaba practicar mi acento", sentencia.

En esta extensa entrevista Unai Emery se confiesa sobre los obstáculos vividos en el banquillo del Emirates Stadium y deja pistas sobre lo que busca para el futuro. Un club en el que no estar tan expuesto, quiere "protección" para poder hacer su trabajo como entrenador. Por ello, un regreso a España entra dentro de sus planes, donde clasificó tres veces al Valencia para la Liga de Campeones y conquistó tres títulos de la Europa League con el Sevilla.