El ramillete de equipos que siguen a Ferran es manifiesto. Guardiola tiene ‘controlado’ al futbolista y el viernes confirmó que Sané -extremo- quiere jugar en otro club. Está claro que va haber un movimiento importante de piezas en la posición. El Borussia Dortmund también está atento, con matices. Su director deportivo estuvo en San Siro para tomar nota del Valencia-Atalanta con el extremo como motivo sustancial. Por pasos. La primera condición borusser es la salida de Jadon Sancho. Los alemanes están dispuestos a retenerlo una temporada más, pendientes de un gran traspaso, que igual es más complicado durante los próximos meses. La Juve también quiere reciclar las banda; ya ha fichado a Kulusevski, pero el sueco tiene otro ADN. El Real Madrid puede buscar un salto ahí, lo mismo que el Manchester United o el Liverpool... El verano puede desencadenar o apagar las tendencias. Mientras, la realidad-prioridad de Ferran es una: el Valencia. El equipo le necesita y el centrocampista lo tiene todo para volver a hacer la diferencia en la nueva normalidad, por base técnica y por potencia física. En Valdebebas sólo chisporroteó, pero consiguió descontrolar a Ferland Mendy en el mano a mano, una situación que no se da a menudo con el lateral izquierdo galo.

La réplica, en Champions

El próximo salto de Ferran está marcado: más asistencias y más goles. El Borussia Dortmund busca un atacante capaz de acercarse a las cifras de Jadon Sancho. La comparación es una excentricidad, pero está viva en la cabeza de Michael Zorc, director deportivo del club alemán. Cada futbolista tiene un contexto y un proceso, pero Sancho está en 20 goles y 18 pases de gol, 17 por 16 en la Bundesliga. Ferran está en cuatro más cuatro en el escenario de LaLiga (más cerrado que la Bundesliga), en el marco de un equipo menos luminoso en ataque y más frío a nivel competitivo. Esa es la frontera que marcan para Ferran Torres (los dos son generación 2000), al que analizan entre la duda y la expectativa. En sus informes considera que tiene que ascender en el escalón de la pegada.

En Champions el inglés está igualado con el valencianista: dos goles y dos asistencias. Esa es la respuesta de Ferran, que no se encontró en San Siro -cierto-, pero se despidió de la competición con un uno más uno en goles y asistencias y fue de lo poco que se salvó en el drama de Mestalla ante la Atalanta. En Liga de Campeones fue el MVP ante el Lille y firmó el pase a Rodrigo ante el Ajax, en el gran triunfo de la fase de grupos.

Ferran es el futbolista más importante del Valencia CF en ataque o uno de los más importantes, junto con Rodrigo y Parejo. Eso dicen el juego y los números. Su crecimiento muscular es evidente, las sensaciones sobre el terreno de juego son impresionantes en directo y el salto respecto al curso 2018/19 sigue vivo. Lo más importante está en su coco, en el chip depredador que se ha activado en su mentalidad. La temporada pasada hizo tres goles y dos asistencias (Sporting, Celta Villarreal, Girona), todas con un peso enorme.

Enorme valor estratégico

Sancho está un peldaño por encima -del resto- hoy, pero Ferran es líder en la comparativa con las figuras de su generación. Antes del parón por la pandemia, el valencianista estaba entre los cinco mejores jóvenes de las cinco grandes ligas en asistencias, ocasiones creadas y regates completados. Ferran se codea con Dejan Kulusevski, Alphonso Davies, Sandro Tonali o Vinícius, figuras de enorme valor estratégico por presente y futuro. La espiral de resultados negativos que vive el Valencia desde hace diez partidos ha empezado a afectar Ferran. Es el momento de romper la dinámica.