Su aparición es una de las pocas noticias positivas de la temporada. El central (San Sebastián, 31/01/2000) representa el triunfo del futbolista inteligente y alimenta de ilusión al Valencia: todavía hay jóvenes que sueñan con triunfar en Mestalla. "En octubre me veo ayudando al equipo", asegura. Lo fácil hubiera sido renunciar al Valencia, pero prefirió jugársela para conquistar su sueño. Recién renovado hasta 2023, Hugo Guillamón le ha ganado el pulso a las dudas y a los escépticos, dentro y fuera del club. Lo ha hecho a puro fútbol, con la entereza de siempre.

Tu renovación deja un mensaje muy positivo para el club y para la cantera, refuerza la idea de que hay un camino y de que el trabajo bien hecho tiene premio.

Lo primero, muchas gracias. Creo que es importante que la gente de las categorías inferiores vea jugadores que llegan al primer equipo después de haber pasado por el mismo camino que están haciendo ellos ahora, que se dan oportunidades al talento que hay en la casa.

¿Cuánto has sacrificado hasta cumplir este primer sueño?

Creo que desde pequeño, cuando empiezas en el Valencia, sabes que tienes que renunciar a cosas, que no puedes hacer lo mismo que tus amigos, que tienes que entrenar duro, que tienes que trabajar duro para poder llegar a debutar y jugar en el primer equipo. La verdad es que sí es un sueño poder estar aquí, en el Valencia.

Por tu trayectoria, creo que la renovación tiene que ver, sobre todo, con la confianza propia en tus posibilidades, que quien más ha apostado por Hugo Guillamón ha sido el propio Hugo Guillamón, más allá del apoyo incondicional de tu familia.

Sí... Sobre todo, en los momentos en los que quizás he estado un poco peor y los he sabido aguantar, he sabido trabajar como el que más. Ahora que me ha llegado el premio lo voy a aprovechar.

Parece todo relacionado con cómo ves el fútbol y con cómo enfocas también la vida.

Desde el primer momento he tenido claro que quería estar aquí, que tenía aquí mi casa, mi familia, mis amigos y creo que eso también ha sido un punto importante para esperar, para ser paciente y llegar a buen puerto.

Podías haber firmado por otro equipo desde enero (terminaba contrato en junio), pero tuviste esa paciencia, como si supieras que iba a caer esa oportunidad. Apuestas, te la juegas y tienes éxito.

Tenía claro que si me llegaba la oportunidad la iba a aprovechar. Por suerte me llegó, por distintas circustancias... Estoy muy contento de como ha salido todo y espero dar mucho más al club.

La lesión de Garay, el no fichaje de un recambio, el momento del equipo... Se tenía que dar todo eso, no era fácil confiar en que ibas a tener 'tu momento'. Luego, compites a muy buen nivel.

Me llamaron para entrenar con el primer equipo después del confinamiento y sabía que se iban a jugar muchas jornadas en poco tiempo, que iban a haber rotaciones y que tenía que trabajar para que llegase esa oportunidad, que por suerte sí llegó desde el primer partido. Tuve confianza en mi mismo y por suerte salió todo bien.

Quizá lo fácil, en un momento determinado, hubiera sido plantearse: 'no me van a renovar y firmó por otro equipo'. En este caso, lo difícil era apostar fuerte por el Valencia.

Sí... Pero yo soy feliz aquí; quería quedarme aquí. Es verdad que se alargó todo un poco, pero al final las cosas han salido bien y ahora toca seguir trabajando, porque esto es el principio y tocar ir a por más.

¿Cuál es el secreto de Hugo Guillamón? ¿Qué es lo que te permite haber ido pasando cortes y quemando estapas con acierto, desde que empezaste de muy niño?

La confianza en mi mismo. En los momentos que no han sido tan buenos no me he venido abajo, he seguido trabajando y confiando en mi juego. Eso es lo que me ha hecho llegar hasta aquí.

Más allá de Ferran, que siempre ha sido un talento evidente, ¿cuánta gente empezó contigo y se ha quedado por el camino?

Es muy difícil llegar hasta aquí, hay muchos jugadores, con mucho talento, que al final, por unas cosas o por otras no son capaces de dar el salto a la élite. Creo que es vital valorar eso; los que hemos tenido la suerte de llegar hasta aquí somos el ejemplo de que hay que seguir trabajando y seguir mejorando porque el salto al fútbol profesional es muy importante.

¿Qué entrenador ha sido determinante por lo que te enseñó o por lo que te ayudó?

He tenido muchos entrenadores y cada uno me ha enseñado una cosa, me han ayudado a ser mejor jugador y mejor persona. Sí que recuerdo al que más tiempo he tenido que es Raúl Muñoz, que siempre me aconsejaba, hasta cuando dejó de ser mi entrenador he mantenido el contacto.

No sé si eres de fijarte en otros futbolistas, no sé si hay algún jugador o algún central que hayas tomado o tomes como modelo, que te guste y que pienses en que puedes incorporar algunas de sus cualidades a tu juego.

Yo creo que Sergio Ramos es un referente ahora mismo en el fútbol español para todos los chavales que estamos empezando, para todos los niños que ven fútbol y creo que es un buen ejemplo en el que nos fijamos todos.

No es un central parecido a ti.

No, pero se pueden aprender muchas cosas de él.

Lo que es alucinante es la soltura y la templanza con la que has entrado, demostrando que juegas igual en categorías inferiores, en el filial o en el primer equipo... has tapado la boca de los más escépticos.

Es lo que he comentado, confío mucho en mi; confío en mi juego, en mi personalidad. Es lo que estás comentando: he jugado en Primera igual que cuando era niño. Es bonito ver como he pasado tantas categorías hasta poder jugar aquí, en Mestalla.

Te plantas en Anoeta o en el Derbi y lo haces como si llevases 50 partidos en LaLiga, verte jugar así fue una especie de reivindicación dedicada para los que tenían dudas, para los que te prejuzgaron.

No... Al final, tienes que centrarte en ti mismo, en mejorar para ti, no para los demás. Obviamente siempre habrán críticas, pero me centro en mi juego, en mi equipo, en dar lo mejor para ellos y ayudar.

Siempre te has visto de central o en esa fase que te probaron como mediocentro pensasté que podía venirte bien el cambio.

Siempre lo he dicho y toda la vida he jugado de central, pero también me siento cómodo de mediocentro; donde el club o el entrenador que esté me necesite yo voy a estar dispuesto a jugar.

¿Tu has sentido esas dudas? Porque vas a las estadísticas y, más allá de que reflajan una de tus virtudes principales como la salida de balón

Siempre habrá gente que no te vea o te critique, pero yo me he centrado en dar lo mejor de mi y ayudar a mis compañeros. Es verdad que hay gente que debate un poco, que si central que si mediocentro, pero yo estoy tranquilo.

El paso que has dado y la renovación suponen, en muchos sentidos, el triunfo del futbolista inteligente.

Es un punto importante el saber estar, el saber colocarse creo que también es fundamental para un central y para cualquier jugador. Creo que eso se me ha dado bien siempre.

Nuestro analista, Gonzalo De los Santos

Siempre me han dicho que juego muy tranquilo, que tengo mucha pausa. También es fundamental que tus compañeros te arropen y eso es algo que he sentido. Desde que entré a este vestuario siempre he tenido el apoyo y la confianza de todos. Eso ayuda mucho.

Recuerdo hace un año, cuando coincidimos en la estación del AVE, que volvías de ser campeón de Europa Sub-19 con la Selección y hablabamos de como se presentaba la temporada en el Mestalla, en jugar en el filial, ¿te imaginabas que podía terminar así?

No, no. Para nada. Tu empiezas el año pensando en que estás en el filial, que tienes que hacer buen año, que quizás se te presenten oportunidades en el primer equipo, pero nunca imaginé llegar a debutar o jugar tantos partidos como en este final de temporada.

El primer punto de inflexión este curso creo que lo marcas en Miralcamp, contra el Villarreal B, de nuevo hay sanciones y lesiones que te permiten estar en el once, juegas bien, gana el equipo -que venía mal- y te enganchas. Hablamos de noviembre.

Ese día fue importante; llevaba semanas sin jugar, no estaba entrando en el equipo y por unas circustancias me toca, como te he dicho, siempre he confiado en mi, sabía que iba a jugar bien, que iba a hacer un buen partido e iba a ayudar a mis compañeros. Ganamos, el equipo compitió muy bien y a partir de ahí tuve continuidad.

En los mejores y en los momentos más críticos del Mestalla, Guillamón ha sido protagonista. Volvemos a la importancia del proceso, del paso a paso, otra experiencia bien resuelta en una categoría difícil para los jugadores jóvenes.

Este año era mi tercera temporada en el filial y me marqué un objetivo de ser un líder para el equipo, de ayudar todo lo posible, hasta febrero y el parón cuando ya empiezo a trabajar con el primer equipo. Creo que la temporada en el Mestalla ha sido buena para mi.

¿Hasta qué punto es importante también la figura de Chema Sanz?

Chema es una persona que te ayuda mucho, que habla mucho contigo, es un entrenador muy cercano y creo que siempre ha estado pendiente de mi, siempre ha intentado ayudarme, en los malos y en los buenos momentos, para corregir también. Creo que es un entrenador importante para el filial.

Debutas en Anoeta, en San Sebastián, ciudad en la que naciste... el fútbol es un cruce de caminos constante. Vaya historia, porque hasta entonces eras, y eres, el central de l'Eliana.

Era mi primera convocatoria de la temporada, porque hubo una lista, ante el Chelsea, en la que al final no entré y lo pensaba y decía: 'que bonito sería debutar aquí, en San Sebastián'. Al final se dio, entré tras el descanso y lo recuerdo con mucha alegría.

¿Pero tu familia es de allí?

No, no. Es de aquí, de València, fue por cuestiones de trabajo, mi hermano y yo nacimos allí.

¿Eres el primer Guillamón futbolista o hay alguno más en casa?

Yo soy el primero, pero mis padres siempre han sido muy aficionados, también les gusta mucho el fútbol, a mi hermana... Aunque sea el único que juega, el fútbol se vive mucho en mi casa.

¿Valencianista?

Desde pequeño (sonríe).

Llega el gran día: debut de titular, en Mestalla, en un Derbi, con ese duelo que le ganas a Roger, con el penúltimo pase a Gayà antes del 1-0 y una actuación luminosa

Desde los días anteriores, que entendí que podía jugar ante el Levante, estaba muy ilusionado. Me hubiese ecantado hcerlo con afición, para disfrutar con ellos. A pesar del resultado creo que el equipo hizo un buen trabajo ese día, acabe decepcionado por eso, por el empate final, por cómo se dio, creo que sí marca un antes y un después, porque fue mi primer partido de 90 minutos.

Y ese mano a mano con Roger, que te intenta desquiciar, pero terminas 'forzando' su expulsión.

Tuvimos un duelo muy bonito que salió bien para mi. A Roger lo conocía porque lo he visto muchos partidos por la tele, sabía que no me lo iba a poner fácil, sabía que es un gran delantero; creo que hice un buen trabajo con Diakhaby.

Después llega otro salto: Valdebebas, el Real Madrid, le quitas un gol hecho a Hazard y creo que es el partido donde te consagras a ojos de todo el fútbol español como promesa.

Recuerdo ese día, había jugado contra el Levante, pero esto ya era otro escenario, que iba a ser totalmente diferente... confiaba en mi. Siempre lo he hecho, sabía que si estaba concentrado, si estaba como siempre, sabía que podía hacer un buen partido. Creo que hicimos una muy buena parte, con el palo y el gol anulado a Rodrigo también. Creo que el resultado fue un poco engañoso. En la segunda parte nos vinimos un poco abajo...

Sesanta minutos de alto nivel.

Sí, aguantas bien, el Real Madrid aprieta; es uno de los mejores equipos del mundo y hasta esa hora de partido hicimos un buen trabajo, luego llega la expulsión, las lesiones y nos quedamos un poco 'cojos'.

¿Es ahí donde más has sentido el salto entre lo que supone defender en Segunda B y en Primera?

Es totalmente diferente. Pasas a jugar contra los mejores del mundo, no sólo por el Real Madrid, cualquier equipo de Primera tiene jugadores muy buenos, de mucho talento y tienes que estar cien por cien concentrado, atento, metido, porque cualquier error te mata.

¿Y dónde está la gran diferencia?

En Primera es todo mucho más rápido, tienes que pensar más rápido, tienes menos tiempo, tienes que estar metido al cien por cien. Quizá en Segunda B te puedes permitir un fallo, pero en Primera, a la que tienes un fallo, te castigan.

¿Cuál es el delantero que más te ha hecho sufrir? Vale elegir cualquiera en estos seis partidos, en Segunda B o en categorías inferiores.

Te diría que Karim Benzema, jugué contra él en Valdebebas y es top mundial... siempre tienes que estar muy atento, porque a la que te despistes te la lía, te hace un gol, te hace una jugada que es asistencia.

Más que los ingleses, los franceses, los alemanes... cualquiera de los muchos y muy buenos que te has encontrado con la Selección.

Sí, sí, no hay punto de comparación. Benzema es uno de los mejores del mundo.

Celades va a quedar engullido por todo lo que ha pasado esta temporada, pero también es el entrenador que confió y te dio la alternativa, que vio lo que podías aportar.

Yo lo voy a recordar siempre y deseo que le vaya todo lo mejor posible. Siempre lo voy a recordar como el entrenador que me hizo debutar; me dio confianza desde el primer día.

Han pasado demasiadas cosas, había problemas graves, pero en esta recta final queda la sensación de que los detalles os han castigado al máximo, siempre han caído del lado rival, que os ha costado todo siempre un poco más, los errores, los penaltis, la barrera que se abre...

Sí, entras en una dinámica en la que todo te cuesta, que llevas menos puntos de los que mereces, pero creo que el equipo siempre ha intentado dar lo mejor de si mismo y es difícil salir de esas situaciones porque todo va en tu contra, que no puedes despegar. Ahora ha acabado el año, hay que hacer autocrítica y volver la temporada que viene con muchas más ganas.

¿Qué cosas te gustaría mejorar de tu fútbol?

Yo creo que puedo mejorar el juego aéreo, creo que puedo ganar muchos más duelos, también la agresividad en cada lance, ser contundente.

Pero en esos apartados también se te ha visto progresión, esta temporada y en el primer equipo.

En estos partidos me he encontrado muy cómodo. Creo que he estado bien... pero la temporada que viene toca volver más fuerte.

Ahora viene el siguiente salto, el más difícil: asentarse.

Claro. Ahora se te va a exigir como un jugador de Primera División y tienes que estar todos los días a un gran nivel para poder mantenerte.

Hace mucho tiempo que el Valencia no daba un central para el primer equipo, creo que el último fue Raúl Albiol, que importante es que Hugo Guillamón se asiente y sirva de referencia para la generación que viene, algunos generando también expectativas importantes.

Para el club es muy importante que los jugadores de La Academia vean que se puede llegar, que hay oportunidades. Creo que hay mucho talento en casa; si les dan esas oportunidades las van a aprovechar y viendo los equipos de las inferiores creo que hay buenos centrales.

Si tuvieras que decir uno, dos o por tres...

Ahora el primero está Guillem Molina, que ha jugado conmigo en el filial, creo que es muy buen jugador, muy buen chico, creo que también se le dará la oportunidad.

¿Dónde te ves en 2023?

Ahora pienso en la temporada que viene, creo que vamos a hacer un gran año todos juntos, espero que consigamos los objetivos que nos marquemos al principio del curso y lo que pase en 2023, queda un poco lejos.

¿Y en octubre, dónde te ves?

Pues ayudando al club, ayudando al equipo a conseguir los objetivos.