La huella que deja David Silva en el Manchester City es imborrable. Durante sus diez años en Manchester, el canario se ha ganado el cariño de su afición convirtiéndose en leyenda del equipo citizen. Tras una despedida amarga del equipo donde el conjunto de Pep Guardiola cayó eliminado en cuartos de final de la Champions League ante el Olympique de Lyon, el presidente de la entidad, Khaldoon Al Mubarak, anunció que el club homenajeará al centrocampista español con una estatua en los alrededores del Etihad como agradecimiento por su trayectoria en Manchester. El futbolista, considerado por muchos aficionados del club como el mejor de la historia, no solo adornará las inmediaciones del estadio sino que también contará con un gran mosaico en la ciudad deportiva del City como recuerdo. El presidente Khaldoon Al Mubarak no escatimó en elogios para valorar la figura del 'Mago' de Arguinegín en el club: "David Silva ha dejado su sello en el equipo, en la historia de este club y en la Premier League. Ha cambiado la historia del club".
El directivo citizen no solo hizo referencia al peso de Silva en el equipo, sino también su presencia en una liga como es la inglesa: "La Premier nunca volverá a ser lo mismo tras la marcha de David. Realmente ha sido un jugador transformador, ha aportado mucho al fútbol inglés". Mubarak también elogió el carácter del canario, donde los jóvenes valores de la academia del City ven en él un espejo en el que mirarse. "La gente a veces ha subestimado el físico de David. Su dureza mental y física es algo que nos sorprendió a todos. Se ha ganado un lugar como parte de la familia City para siempre", apuntó el presidente.David Silva llegó al Manchester City en el 2010 procedente del Valencia CF a cambio de treinta millones de euros. Durante los diez años que defendió la elástica del Manchester City, el centrocampista ha disputado un total de 436 partidos en los que anotó 77 goles y repartió 140 asistencias, que ayudaron a conquistar cuatro ligas, cinco Copas de Liga, dos Copas y dos Community Shield.
