El mercado de fichajes se ha cerrado y uno de los objetivos de Javi Gracia en estas dos semanas de parón liguero es recuperar a Gabriel Paulista. Sin fichajes, no hay mejor refuerzo para el técnico que volver a tener a sus órdenes al brasileño. El jugador se encuentra en pleno proceso de recuperación y con las opciones intactas de disputar el Villarreal-Valencia dentro de dos semanas. Gabriel todavía no ha saltado a los campos de entrenamiento para trabajar con el grupo, pero confía en hacerlo en los próximos días a la espera de cómo evoluciona su lesión. Lo más probable es que el jugador aproveche esta semana para hacer un trabajo de recuperación de calidad y la semana que viene comience a incorporarse incrementando las cargas de trabajo progresivamente. Javi Gracia y el resto de la plantilla lo esperan con los brazos abiertos.

El jugador fue uno de los intocables de Gracia durante la pretemporada. Fue titular indiscutible y marcó un gol clave a la salida de un córner en la victoria de la primera jornada contra el Levante. El jugador arrastraba problemas musculares desde antes del Derbi. Sin embargo forzó para ayudar al equipo en Balaídos y el músculo le pasó factura. El jugador se sometió a pruebas médicas y el resultado de las mismas revelaron que sufría una rotura en el muslo izquierdo con un tiempo estimado de recuperación de tres semanas como mínimo. Gracia, sin fichajes a la vista, ha tenido que echar mano de la pareja Hugo Guillamón-Mouctar Diakhaby contra el Huesca, la Real Sociedad y el Betis. La idea del entrenador es recuperar a Paulista contra los amarillos. El brasileño puede hacer mejor a sus compañeros y el pasillo central del equipo puede ganar en seguridad. Gabriel no está en el grupo de capitanes -de momento- pero ejerce como un líder más del vestuario. Su influencia en el equipo dentro y fuera es vital.

El brasileño ha sido inscrito en Liga como extracomunitario. El club y el futbolista confiaban en la posibilidad de tramitar su pasaporte antes de que se cerrara el mercado de fichajes. Pero ha sido imposible. Su doble nacionalidad no ha llegado a tiempo y no parece tampoco que vaya a ser cuestión de meses. Desde su entorno van a trabajar para que esté disponible en las próximas ventanas, pero la realidad es que podemos estar hablando de un plazo de un año que pondría en peligro hasta su sueño de tener una oportunidad en la selección española de cara a la Eurocopa 2021.