La situación del Valencia Mestalla en la clasificación del grupo 3B de Segunda B empieza a ser delicada. Los de Óscar Fernández son penúltimos con 4 puntos en 6 jornadas. Solo por delante del colista: el Atzeneta de David Albelda. El filial todavía no conoce la victoria esta temporada. Empataron contra Atzeneta, Peña Deportiva, Hércules y Villarreal B el pasado fin de semana con un desafortunado autogol de Facu González en el minuto 88 y perdieron frente al Orihuela -con penalti claro no pitado- y ante el líder Ibiza que lo ha ganado todo.

Los responsables técnicos de la Academia apostaron por la juventud y fueron conscientes desde el primer momento que el Mestalla podía atravesar por dificultades en el arranque de la temporada como consecuencia de una confección de la plantilla extremadamente joven con hasta 8 juveniles: Joseda Menargues, Facu González, Jesús Vázquez, David Ruiz, Iván Muñoz, Pedro Alemany, Hugo González y Fran Pérez. El Mestalla es el equipo más joven de la categoría por encima del resto de filiales: Villarreal, Levante, Barcelona y Espanyol. El club asumió ese riesgo en verano con todas sus consecuencias y confía en que el equipo vaya de menos a más con el paso de las semanas.

De momento, no hay preocupación. Al contrario. El club está satisfecho con el trabajo de Óscar y el rendimiento de los chavales porque el filial ha competido en todos los partidos a excepción de la goleada (0-4) de la UD Ibiza de Amadeo Salvo y Juan Carlos Carcedo que cuentan sus partidos por victorias. Los chavales están dando la cara. El equipo ha dejado buenas sensaciones, pero no es contundente en las áreas en ataque y en defensa y eso le impide cerrar los partidos. El equipo crece poco a poco sin perder de vista que el nuevo formato de la categoría permite menos margen de error que en años anteriores.

El partido de este sábado (16:30) contra el filial del Levante en el Antonio Puchades de Paterna es una auténtica final para el equipo sobre todo a nivel mental. La plantilla necesita ganar para disparar los niveles de confianza. «Los chicos se merecen una victoria por todo el trabajo que están haciendo», decía el entrenador en Vila-real.

El club, paralelamente al trabajo del cuerpo técnico, ha comenzado a peinar el mercado de fichajes en busca de dos perfiles de futbolistas que refuercen al equipo a partir del mes de enero. Se busca un delantero y un jugador de banda izquierda.