Así es la gestión del Johor FC

¿Será capaz el Príncipe de Johor de cambiar el Valencia CF? Es una pregunta sin respuesta. Lo único demostrable ahora mismo es que su gestión deportiva como presidente del Johor FC ha sido exitosa y eso le ha permitido ganarse el respeto y el reconocimiento del mundo del fútbol más allá de su fortuna. Tunku Ismail ha sido capaz de transformar el club en ocho años. Cogió los mandos de un club a la deriva en 2012 con dos décadas de sequía de títulos y ha llevado a los ‘Tigres del sur’ a la élite convirtiéndolo en el mejor equipo del sudeste asiático y uno de los más grandes de Asia. Sus 16 títulos (siete temporadas consecutivas proclamándose campeón de liga) en 8 años lo avalan. Aunque su gran éxito, es haber dotado al club de una estructura, un fútbol base y unas instalaciones con tecnología punta que lo han convertido en un club referente en toda Asia y que no tienen nada que envidiar al fútbol europeo.

De la inversión a los títulos

El Príncipe ha construido un equipo ganador de la nada. En 2012 se hizo cargo del Johor Football y lo convirtió en el Johor Darul Tazim (JDT). Campo vacío y veinte años sin ganar. El reto era difícil. Sus primeros grandes fichajes en 2013 fueron Dani Güiza a razón de 3,2 millones de dólares y el italiano Simone Del Nero, pero la adquisición que le puso en el escaparate mundial fue Pablo Aimar. La operación la cerró Martín Hugo Prest que actualmente es la mano derecha del Príncipe en la parcela deportiva y está llamado a ser protagonista en la confección del nuevo Valencia 2021/22. Los resultados de la inversión no tardaron. En 2014 conquistó la Superliga de Malasia por primera vez. En 2015 se expandió y firmó su primer convenio de colaboración con el Borussia Dortmund y fue el primer equipo del sureste de Asia que conquistó la AFC Cup, equivalente a la Europa League en Asia. Y así hasta 16 títulos. Las vitrinas de trofeos del club crecieron al mismo tiempo que lo hacía el club gracias a la inversión en fichajes, metodología de trabajo, en una Academia referente en el fútbol del sureste asiático y en las mejores instalaciones. Tunku levantó un ‘Trainning Center’ (un centro de entrenamiento de alto rendimiento) a la vanguardia con la última tecnología y como no, la joya de la corona, el nuevo estadio del Johor FC.

El impulso del estadio

El Sultan Ibrahim Larkin Stadium comenzó su construcción en 2016 con un costo aproximado de 200 millones, lleva el nombre del gobernante del estado y fue inaugurado en 2020 con una capacidad de 40.000 espectadores. El Sultán, padre de Tunku, puso dinero de su bolsillo para la construcción. Dentro del estadio se encuentra la sede del club, un centro de entrenamiento y una ‘megastore’. El estadio tiene la distinción de ser el campo de fútbol más avanzado del sudeste asiático y está en la carrera por el premio al estadio mundial del año. El campo es candidato a albergar algún torneo internacional y muchos clubes europeos lo tantearon para hacer una gira asiática de pretemporada. Por desgracia, las conversaciones se frustraron por culpa de la pandemia mundial de Covid-19. El Príncipe ha construido un estadio referente. Una delegación de la selección de fútbol de Brasil visitó las instalaciones del Johor FC por si necesitan concentrarse con vistas al Mundial de Qatar de 2022.

El estadio y el centro de entrenamiento (primer campo indoor del sureste asiático) están equipados con tecnología de última generación. Además, el Príncipe está construyendo un centro ‘fitness’ y médico junto en el campo de entrenamiento para que los lesionados reciban el mejor tratamiento posible. Tunku tiene una premisa: la única forma de llegar al éxito es invertir. Su Johor FC es el mejor ejemplo.