"Si mi abuela luchó hasta que no pudo más... ¿Yo no voy a poder?"

La emotiva carta de Samu Macià, de la Academia VCF, a sus compañeros de equipo

"Si mi abuela luchó hasta que no pudo más... ¿Yo no voy a poder?"

"Si mi abuela luchó hasta que no pudo más... ¿Yo no voy a poder?" / SD

No hay fútbol sin emoción, ni Valencia CF sin sentimiento. Samu Macià, juvenil en la Academia VCF, es prueba de ello y ha sido protagonista estos últimos días. El fútbol ha vuelto ya para todos los miembros de la cantera valencianistas. Bueno, para ser exactos... para casi todos.

Algunos, por desgracia, todavía siguen al margen del verde porque viven la cara b del fútbol: las lesiones. Y en este sentido, el alicantino Samu Macià sufrió durante la pretemporada una rotura de ligamento cruzado y sigue recuperándose de su lesión. Con la temporada en blanco, su estado de ánimo no ha cambiado: trabaja a diario para volver a jugar y mientras, desde fuera, apoya a sus compañeros mientras el equipo crece a pasos agigantados. Sin ir más lejos, el Juvenil B quedó líder del Grupo VIII-B de la Liga Nacional. Su testimonio se ha hecho viral en las últimas horas por este escrito que Samu hizo para sus compañeros de equipo.

"El 19 de Septiembre de 2020 es una fecha que difícilmente se me va a olvidar. Es imposible no tener en mente ese momento. Todos los días paso por delante de ese campo y es imposible que no me quede mirando el área donde pasó.Desde que caí al suelo chillando y sin poder mover la pierna, me vino a la cabeza sin pensar, que estaba bastante jodido. Si pudiera volver y hablar con mi yo del pasado le diría que aproveche cada momento; cada paso que podía dar, cada carrera, cada entrenamiento.

Siento melancolía cuando veo todos los días a mis compañeros que se van a entrenar, se van a los partidos, vuelven cansados, con dolores. Mientras yo esté en este túnel tan oscuro, ellos tendrán que aprender a valorar cada cosa que tienen y cada día que pasan. (…) Yo me encargaré de que no estén tristes por jugar mal, porque algo les sale mal o por lo que sea. Tengo energía y alegría para repartirles todos los días, de eso no tengo duda.

Muy pocas veces desde la lesión puedo decir que haya sentido miedo, desde que tengo uso de razón llevo viendo a mis 4 abuelos sin miedo y peleando por la vida. ¿Si ellos eran felices luchando por su vida hasta que no aguantaron más, porque no lo iba a ser yo luchando contra una lesión de 9 meses? El sábado anterior a mi lesión cuando encendí el móvil después de acabar el partido, empecé a ver muchos mensajes. De los 4 abuelos que me enseñaron a luchar, la última lo acababa de dejar de hacer. Ella dejó de luchar, pero ahora me tocaba a mí, como ellos me enseñaron.

Ahora estoy en un camino largo y oscuro en el que me toca sufrir mucho, pero estoy seguro que voy a salir mucho más fuerte y voy a volver a disfrutar. Constancia, dedicación y resiliencia. Doy gracias por tener la familia que tengo tanto en Residencia como en casa, lo querido que me siento es un sentimiento que no se puede explicar con palabras… Cuando me vaya del Valencia CF (ojalá que sea lo más tarde posible) me iré feliz sabiendo que llegué siendo un niño y me voy siendo un hombre. Con muchos valores y con muchísimo aprendizaje”.