Economía sostenible

Así tratan de descarbonizarse las grandes empresas españolas

Compañías energéticas y de otros sectores pisan el acelerador para decir adiós al CO2

Cepsa, una de las empresas españolas que avanzan hacia la descarbonización

Cepsa, una de las empresas españolas que avanzan hacia la descarbonización / cepsa

F. J. Benito

F. J. Benito

El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) ha hecho pública esta primavera la tercera entrega de su Sexto Informe de Evaluación dedicado a la mitigación del cambio climático. El documento alerta de que las emisiones de gases de efecto invernadero siguieron creciendo a lo largo de la última década, una tendencia que se debe revertir con urgencia para alcanzar los objetivos de París: un máximo de incremento de temperatura de 1,5ºC o sustancialmente inferior a 2ºC. ¿Qué hacen nuestras grandes empresas para reducir la huella de carbono? A lo largo de este reportaje se muestran algunas de las realidades en marcha.

Iberdrola

Iberdrola encabeza, por ejemplo, el desarrollo del hidrógeno verde con más de 60 proyectos para responder a las necesidades de electrificación y descarbonización de sectores como la industria o el transporte pesado. Se sitúa así al frente del nuevo reto tecnológico que supone la producción y el suministro de hidrógeno a partir de fuentes de energía 100% renovable en el proceso de electrólisis. Para ello, ha construido en Puertollano (Ciudad Real) la mayor planta de hidrógeno verde para uso industrial de Europa, utilizando electricidad 100% renovable para la producción de amoniaco y fertilizantes verdes.

Además, Iberdrola y Grupo Fertiberia impulsan, junto con la Universidad de Huelva, el lanzamiento en Andalucía del ‘Clúster de Hidrógeno Verde Puerta de Europa’. El objetivo es concentrar en el polo industrial de Huelva (en concreto en Palos de la Frontera) el mayor centro de producción, transformación y consumo de hidrógeno verde para descarbonizar la industria y el transporte pesado. El clúster cuenta con más de 80 socios y tiene previsto desarrollar más de 600 MW de electrolizadores, que son el mecanismo necesario para obtener el hidrógeno.

Siguiendo en esta línea, y junto con Cummins, líder energético mundial, la compañía ha acordado la instalación en Guadalajara de una de las mayores plantas de electrolizadores del mundo para la producción de hidrógeno verde. Se espera que esté operativa en 2023.

Hidrógeno verde producido por Iberdrola

Hidrógeno verde producido por Iberdrola / Iberdrola

Iberdrola está también involucrada en la descarbonización de otros procesos industriales, materializada en acuerdos como el alcanzado con BP para desarrollar el mayor proyecto de hidrógeno verde en la Comunidad Valenciana. El propósito de esta alianza es instalar un electrolizador para la generación de hidrógeno verde en los terrenos propiedad de BP en el polígono industrial de Castellón, El Serrallo.

Con Porcelanosa también se trabaja en la primera solución a escala real para electrificar la producción cerámica, combinando renovables, hidrógeno verde y bomba de calor. Es una solución que busca optimizar la energía térmica residual sustituyendo hasta la mitad del gas natural como combustible por hidrógeno verde.

En su ruta de descarbonización, Iberdrola también está trabajando con la mercantil Foresa para analizar el desarrollo de inversiones en hidrógeno renovable para la producción industrial de metanol verde en Galicia. Ambas compañías podrían abordar la construcción de una planta de hidrógeno verde de 20 MW (ampliable a 150 MW), obtenido por electrólisis con energía renovable.

Un hito fundamental en el sector del transporte será la Red Transeuropea de Transporte basada en el hidrógeno verde. Consistirá en un conjunto de redes prioritarias de transporte pensadas para facilitar la comunicación de personas y mercancías a lo largo de toda la Unión Europea. A lo largo de esta red Iberdrola desplegará, en lugares clave, plataformas logísticas destinadas al transporte por carretera (19 puntos, entre ellos Zaragoza, Murcia y la Comunidad Valenciana) para el abastecimiento, principalmente a flotas de camiones por carretera.

El proyecto es, asimismo, complementario con el que se ha puesto en marcha en la Zona Franca de Barcelona, donde durante diez años una hidrogenera dará servicio a los autobuses de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) y otras flotas e industrias del polígono. La puesta en marcha de la hidrogenera de la Zona Franca, que se ha ejecutado en menos de un año, va a permitir la creación de un hub de hidrógeno verde en una de las áreas industriales más importantes del país. Servirá para aportar este vector energético a la empresa TMB, que ya ha puesto en circulación el primer autobús impulsado por hidrógeno verde por las calles de la ciudad condal.

Endesa

Por otro lado, Endesa anunció en 2020 un ‘megaplan’ inversor de 25.000 millones hasta 2030, destinado a impulsar las renovables y la digitalización de la red eléctrica, con el que prevé que, a final de esta década, el 80% de toda su generación esté libre de emisiones de CO2.

En el corto plazo, hasta 2023, Endesa ha anunciado una aceleración en la senda de la descarbonización sustentada en un relevante aumento de sus inversiones en energías renovables y digitalización de su red, así como en electrificación de la demanda residencial y de sectores como la industria o el transporte. En primer lugar, va a aumentar un 25% el volumen de sus inversiones para los tres años del periodo 2021-2023, en relación al plan estratégico 2020-2022, hasta alcanzar los 7.900 millones de euros. De esta cifra, 3.300 millones estarán destinados a incrementar el parque generador de energía renovable, una cifra que es un 20% más elevada que en el plan precedente.

Endesa impulsa las renovables

Endesa impulsa las renovables / Shutterstock

Con esta inversión, la empresa alcanzará los 11.500 MW solares, eólicos e hidráulicos a final de 2023. Es decir, en torno a un 50% más respecto a los 7.700 MW con que concluyó el ejercicio 2020.

El crecimiento en energías limpias se sustenta sobre un portfolio de proyectos de 7.300 MW con fecha estimada de entrada en operación entre 2021 y 2025. De ese portfolio, el 68% corresponde a plantas fotovoltaicas y el 32 % restante, a eólicas. Endesa prevé obtener un retorno rentable de toda su inversión en energías limpias apoyándose en su base de clientes. Se elevan un 30 % en relación al plan anterior, hasta los 2.600 millones de euros.

Galp

En cuanto a las empresas que generan hidrocarburos, Galp ocupa actualmente el tercer puesto como mayor productor de energía solar fotovoltaica en la península ibérica, con una capacidad instalada de aproximadamente 1 GW en producción, como parte de una cartera total de 4,7 GW, entre los que se incluyen proyectos en desarrollo en España, Brasil y Portugal. Espera alcanzar el objetivo de incrementar la capacidad de energía renovable de 4GW para 2025 y más cerca de los 12GW comprometidos para 2030.

El Banco Europeo de Inversiones (BEI) y Galp firmaron el año pasado tres acuerdos de financiación para la construcción de plantas de energía solar y el despliegue de estaciones de recarga de vehículos eléctricos (VE) en toda la península ibérica. En conjunto, Galp y el BEI firmaron una financiación total de 406,5 millones de euros, que podría incrementarse hasta los 731,5 millones de euros en una fase posterior. En conjunto, los tres proyectos apoyan la acción climática y la cohesión social, y generarán una media total de 3,6 TWh de energía renovable al año, equivalente al consumo energético de casi 940.000 hogares.

Parque solar en Chile con participación de Galp

Parque solar en Chile con participación de Galp / Galp

Un informe de la entidad Carbon Tracker que analiza la capacidad de transición ecológica de las grandes compañías señala que ExxonMobil es una de las «menos preparadas», pues sus objetivos climáticos son «débiles» y el «80% o 90%» de su cartera de proyectos que siguen el modelo tradicional no será competitiva si se limita la subida de temperatura a 1,6 grados centígrados. Ese porcentaje se sitúa entre el 40 y el 50 % para la italiana Eni y Repsol, y entre el 50 y el 60 % para la británica BP y la francesa Total.

Cepsa

Por su parte, Cepsa invertirá entre 7.000 y 8.000 millones de euros a lo largo de la década, dentro de su nuevo plan estratégico ‘Positive Motion’ 2030, cuyo objetivo es liderar la transición energética en España y Portugal, según ha informado la compañía. Esta nueva estrategia tiene dos ámbitos de actuación, la movilidad sostenible y el new commerce, y la energía sostenible, que se definirán a través de los Energy Parks (o parques energéticos diversificados y sostenibles) y de alianzas con otros socios estratégicos.

Más de la mitad de su ebitda o beneficio bruto de explotación procederá de negocios sostenibles en 2030, momento en el que tiene previsto reducir sus emisiones de dióxido de carbono (CO2) de alcance 1 y 2 un 55 %, y las de alcance 3, entre un 15 % y un 20 %. Con ello, prevé alcanzar las cero emisiones netas en 2050. La empresa aspira además a destinar el 60 % de su presupuesto a áreas sostenibles a partir de 2023.

Repsol

Repsol, una de las compañías que más emisión de CO2 presenta en España, lanzó el año pasado una estrategia integral de financiación sostenible para hacer frente a su proceso de transición energética, convirtiéndose en la primera compañía de su sector en el mundo que presentó «un marco financiero innovador» que alcanza a todas las actividades de la compañía, según informó en su día.

Punto de carga de coches eléctricos

Punto de carga de coches eléctricos / Repsol

Repsol, en su estrategia de descarbonización, prevé reducir sus emisiones un 12% en 2025 y un 25% en 2030 respecto a las cifras de 2016. En 2040 esta reducción ya sería de un 50%, para alcanzar la neutralidad carbónica en 2050. «Vamos a transformar nuestros complejos en hubs multienergéticos, capaces de generar productos de baja, nula o incluso negativa huella de carbono y de impulsar nuevos modelos de negocio basados en la digitalización y la tecnología. Para ello, nos apoyaremos en cuatro grandes pilares: la eficiencia energética, la economía circular, el hidrógeno renovable y la captura y uso de CO2», señala este grupo empresarial.

Cemex

Por su parte, CEMEX ha conseguido disminuir, en un solo año (2021), un 4,7% de dióxido de carbono emitido por tonelada de material cementante. Este dato lo recoge el último informe presentado por la compañía, ‘Construyendo un Mejor Futuro’, donde también se recoge que un 30% de la electricidad empleada en sus operaciones de cemento provino el año pasado de energías renovables. Los nuevos tipos de clínker (componente clave del cemento) usados por la empresa generan ya un 20% menos de emisiones.

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Contacto de la sección de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es