Les pido perdón así un poco de antemano, pero les aseguro que no he tenido más remedio de escribir lo que a continuación van a leer y que me remonta en el tiempo de forma formidable y de alguna manera también irrisoria, pero irrisoria de puro cariño y de recuerdos. Se trata de lo siguiente. Hace ya muchos años, casi cuando empezaba a vivir SUPER como periódico deportivo diario, es decir hace un montón de tiempo, más tiempo que años tiene Toni Lato, yo pacté como director de este diario con el presidente del Valencia CF, Paco Roig entonces, que teníamos que intentar por todos los medios posibles conseguir que el Valencia regresara al pantalón negro que nos acompañó al principio de los tiempos valencianistas y que nos distinguiría sin duda de un Real Madrid que parecía que tenía -y tiene- conquistados a todos los medios de comunicación.

Y nosotros, los de SUPER, pusimos en práctica el debate de 'pantalón negro o pantalón blanco' y le dimos publicidad a todos nuestros lectores publicando en el diario su nombre y su voto para que se hiciera público y para que de alguna forma arrastrara también a la opinión pública con el objetivo de que al final ganara el pantalón negro de forma brutal -y eso sucedió- y que el Valencia se olvidara de ir totalmente de blanco en el futuro, tal y como sucedió. Y sí, el valencianismo se volcó con esa idea y en SUPER llegamos a completar dos páginas enteritas con la opinión de nuesytros lectores -si alguno de ustedes se acuerda da haber salido publicado con ese tema le ruego que me lo haga saber, me emociona- y claramente la opinión generalizada era que el Valencia tenía que cambiar los colores de su pantalón y adoptar un negro impoluto que le hacía diferente a todos los quipos. Alguno apuntó de que se esa forma iba el Salamanca o la selección alemana de fútbol, pero en ese momento daba del todo igual.

En SUPER, llegado el momento, hicimos una reunión de tomo y lomo con Paco Roig y le afrecimos de forma personal el resultado de muestra encuesta, que le encantó y a partir de ese instante comenzó a producirse el cambio en nuestra indumentaria tipo. Y sí, sucedió, el Valencia recuperó ese pantalón negro y nos hicimos diferentes del resto del fútbol español. El blanquinegre se hizo poderoso y luego, mucho tiempo después, también hizo acto de presencia el naranja para distinguirnos de todo bicho viviente-. Y eso sucedió y por eso estoy especialmente contento con la decisión del Valencia de regresar al pantalón negro aprovechando la presentación oficial de la marca Puma. Y sí, es algo muy simple y parece incluso un poco bobo. Pero yo no les voy a engañar y sí les digo que al ver ese pantalón negro he regresado de alguna forma a los inicios de SUPER y a una de esa iniciativas -como la de la peluca naranja en homenaje a Jaume Ortí- que marcaron de alguna forma el devenir de este diario y el devenir, por añadidura, de todos los que estamos aquí viviendo ahora mismo el regreso a ese pantalón negro.

Por lo tanto aplaudo a Puma y aplaudo al Valencia CF por cambiar la última equipación que daba la impresión de que regresábamos al blanco con medias negras también del principio, pero no exclusivamente del principio. Y sí, este Valencia que viene avalado por la marca Puma me hace retroceder a los tiempos pasados, a los inicios de este SUPER que hoy tienen en sus manos, y de alguna forma yo me he sentido ahora mismo de nuevo director por unos segundos. Y sí, ha sido precioso.