Está todo crispado, brutal y sorprendentemente crispado para estas alturas del calendario, y yo no le doy más vueltas y tengo claro que aquí se hará todo lo que quiera y le de la gana a Peter Lim sin ningún tipo de dudas ni de pensamientos. El tema, para que me entiendan todos ustedes, yo lo tengo absolutamente claro. Peter Lim compró legalmente el Valencia CF

Y Lim -sobre el que no tengo contacto alguno y desconozco si algún periodista de València habla con cierta asiduidad con el de Singapur-sí parece que está preocupado por la marcha económica y deportiva de la escuadra que él sí compró y en estos momentos se dispone él a tomar las decisiones que estime más oportunas, y esas decisiones les pueden parecer a ustedes raritas, extrañas, inoportunas... pero al fin y al cabo eso da igual y de lo que sí se trata es de que el Valencia va a hacer lo que quiera Lim, cuando quiera Lim y a la hora o día que proponga el propio Lim. Desde fuera, desde la distancia, nos puede parecer algo extraño su puesta en escena, pero no deberíamos olvidar nunca que es la persona que se interesó por el Valencia en un momento gris y la que consiguió con su trabajo y su gente de confianza que Bankia diera luz verde con todas las de la ley para que se convirtiera en el dueño absoluto de nuestro club. Y eso, así sin más, quiere decir una cosa muy clara. ¿Cual? Pues una muy simple y muy directa. Tal como están las cosas Peter Lim puede hacer ahora mismo lo que quiera con su club y ese 'ahora mismo' a mi me indica que la venta de Rodrigo. Me puede gustar más o menos, pero lo que sí que es indudable es que en caso de conflicto de intereses, en el caso de que una parte quiera una cosa y la otra otra muy distinta, manda simpre el que se considera dueño y manda siempre el que es el dueño de verdad. Así las cosas yo no distingo entre Singapur y la gente que está trabajando en Valencia.

Puede existir guerra de intereses y puede suceder cualquier asunto de cierta relevancia. Pero no nos equivoquemos. Aquí manda Lim y Lim fue quién compró el Valencia a Bankia tras una gestión nefasta de algunos valencianos. ¿Protestamos a Peter Lim? Pues miren, ahora mismo lo más fácil y lo que es del todo y obligatoriamente asumible es llegar a la conclusión de que aquí manda Lim y se va a hacer lo que Lim quiera. Marcelino puede pedir lo que quiera, MarcelinoAlemany... y tristemente yo les tengo que decir que en estos momentos no tengo ni idea de lo que pasa por la cabeza de nuestro máximo accionista. Ahora bien, lo que sí que tengo claro es que lo que sí pase al final será lo que se haga. Él manda.