El Consell Valencià de Col·legis Veterinaris (CVCV), que integra a los veterinarios de toda la Comunitat, ha presentado este martes la Red de Vigilancia Epizootiológica, que constituye el primer registro sobre zoonosis de mascotas, enfermedades propias de los animales domésticos que incidentalmente pueden contagiarse a las personas.

La nueva red se conformará a partir de las comunicaciones que, de forma obligatoria y telemáticamente, tendrán que declarar los veterinarios clínicos cada vez que diagnostiquen alguna de las diez enfermedades recogidas en la orden 3/2016 de 4 de marzo, de la Consellería de Agricultura.

La presidenta de del CVCV, Inmaculada Ibor, ha presentado el registro acompañada por el director general de Agricultura, Ganadería y Pesca, Roger Llanes, y por el jefe del Servicio de Vigilancia Epidemiológica de la Conselleria de Sanitat, Javier Reig.

Para respaldar el proyecto y evidenciar sus conexiones con la medicina humana, en el acto de presentación ha participado igualmente la presidenta del Ilustre Colegio de Médicos de Valencia, Mercedes Hurtado, que ha defendido en su intervención el principio conocido como 'One health' (una sola salud).

Este principio "obliga a veterinarios y a médicos a trabajar unidos, a colaborar en todas aquellas patologías, que si bien puedan afectar en un principio a los animales también puedan transmitirse a las personas", ha detallado.

Existe también información detallada sobre posibles zoonosis alimentarias, aquellas cuya vía de transmisión es esencial o fundamentalmente alimentaria, o sobre las zoonosis no alimentarias transmitidas de un animal al hombre, con o sin vector, pero sólo para el caso de animales de abasto (ganadería).

La creación de esta red epizootioógica valenciana permitirá obtener esta última información sobre la distribución de las principales zoonosis que afectan a los animales domésticos como perros y gatos.

En la Comunitat Valenciana, según los datos oficiales del RIVIA, están registrados hasta 700.000 canes y otros 30.000 felinos, aunque se estima que la población real de estos animales es sensiblemente superior.

Llanes ha precisado que este registro permitirá en el futuro conocer la situación real de las principales enfermedades zoonóticas de nuestras mascotas, establecer la susceptibilidad y riesgo de la población animal o humana, plantear las medidas preventivas más adecuadas para evitar contagios, conocer el grado de prevalencia, monitorizar y detallar la distribución geográfica de estas zoonosis y, en definitiva "mejorar la salud humana y la animal".