En 2019 se prevén diagnosticar 33.307 nuevos casos de cáncer de mama, un tumor que tiene una tasa de supervivencia a cinco años superior al 90 %, es decir más de 90 de cada 100 personas que lo han padecido continúan vivas después de cinco años del diagnostico.

Estos son algunos de los datos que ha dado a conocer la Asociación Española con motivo del Día del Cáncer de Mama (AECC), que se mantiene en segundo lugar en incidencia en España con esa previsión de nuevos casos, de los que un cuarto son mujeres de Madrid y Barcelona.

Según la Sociedad Española Oncológica Médica (SEOM), en 2017 murieron 6.573 mujeres por cáncer de mama metastásico, pero existen fármacos nuevos más selectivos y menos tóxicos que, asociados a tratamientos clásicos como quimioterapia u hormonoterapia, permiten incrementar la supervivencia y mejorar la calidad de vida de una manera muy significativa.

A principios de los años 80, las mujeres diagnosticadas de cáncer de mama tenían unas posibilidades de estar libres de recaída a los cinco años tras el diagnóstico que se situaba en torno al 70 %. En la actualidad, la cifra se aproxima a casi un 90 %.

Uno de los hitos más significativo en los últimos años ha sido el conocimiento de la heterogeneidad del cáncer de mama, una enfermedad que se estima que desarrollará una de cada ocho mujeres a lo largo de su vida; un cáncer con subtipos biológicos diferentes que precisan tratamientos específicos.

La inmunoterapia empieza a demostrar beneficio en un subgrupo reducido de pacientes con cáncer de mama.

Este tipo de cáncer concentra de forma muy notable la actividad de ensayos clínicos - 312 ensayos, seguido del cáncer de pulmón con 301- y el mayor número de publicaciones -2.838, seguido del cáncer colorrectal con 2.302, según el Primer informe sobre la investigación e innovación en España 2018.

En estas tres décadas otro hecho de gran relevancia ha sido el incremento de cirugías conservadoras y menor intervención sobre la axila, con lo que se evitan complicaciones y se mejora la calidad de vida de las mujeres.

-Los datos de este tipo de cáncer de 2017 de la AECC apuntan a que un 16 % de las mujeres que fueron diagnosticadas durante ese año tenían una situación de riesgo socioeconómico en el momento de recibir la noticia.

- Para 4.223 mujeres en edad laboral, ya sea por encontrarse en desempleo (con o sin prestación), ser trabajadoras por cuenta propia o disponer de bajos ingresos, el cáncer supone un serio agravante a sus condiciones previas.

- 2.030 mujeres en situación de desempleo se diagnostican cada año de cáncer de mama.

- 1.252 mujeres diagnosticadas de cáncer de mama son autónomas, es decir, que trabajan por cuenta propia.

- 941 mujeres trabajadoras por cuenta ajena con rentas inferiores al salario mínimo interprofesional son diagnosticadas de cáncer de mama.

- A esta situación se suma que, además de contar con bajos ingresos, las afectadas también tienen que asumir cerca de 150 euros al mes de gastos derivados de la enfermedad (aumentando el gasto en salud del presupuesto familiar, de un 3 % en situación de ausencia de enfermedad, a un 7 % al 11 % en situación de enfermedad).

- Las mujeres afectadas suponen un 0,12 % de la población total de aquellas que tienen más de 15 años; el 0,10 de las que cuentan con entre 15 y 64, y el 0,24 % de las que han cumplido más de 65 años.

- Durante 2018, la AECC atendió a 8.983 personas afectadas de cáncer de mama en su servicio de atención psicológica especializada, de las que 7.425 eran pacientes y 1.558 familiares.