Desde que vio la luz por primera vez, allá por el año 2005, Google Maps ha permitido a millones de usuarios viajar por todo el mundo sin necesidad de moverse de su casa. Durante todos estos años, la popular aplicación de mapas no ha dejado de evolucionar. Son multitud los cambios que este servicio ha experimentado, desde la incorporación en 2007 de Street View -vista a pie de calle- hasta las últimas innovaciones en inteligencia artificial, realidad aumentada y reconocimiento visual.

Poco queda ya de aquel Google Maps original, cuando en 2004 los hermanos daneses Lars y Jens Eilstrup Rasmussen llegaron al gigante tecnológico una propuesta para crear una aplicación web que mostraba mapas estáticos, al mismo tiempo que proporcionaba a los usuarios la capacidad de buscar, desplazarse por el mapa y hacer zoom para acercarse a los lugares elegidos, entre otras funciones.

No obstante, durante estos años no todo han sido cambios. Hay algo que se mantiene inalterable en Google Maps. Y es que determinados servicios siguen siendo lugares 'prohibidos', al menos para esta aplicación, que mantiene pixeladas determinadas áreas de sus mapas para que no se puedan ver los edificios, complejos y espacios que esconden.

Estos son algunos de los lugares que Google Maps no permite, fundamentalmente por razones de seguridad pero en algunos casos por motivos totalmente desconocidos, que se puedan contemplar de forma detallada.

High Frequency Active Auroral Research Program

En este enclave de EEUU se desarrolló un enclave financiado por la Fuerza Aérea y la Marina de los EEUU. Su objetivo fue estudiar las propiedades de la ionosfera. A pesar de que el programa supuestamente ya finalizó, en Google Maps resulta imposible acercarse a las instalaciones.

Israel

Las imágenes 'prohibidas' de Google Maps no solo afectan a espacios concretos, sino también a países enteros. Es el caso de Israel. Aunque en la vista aérea las calles del país no aparecen pixeladas y permiten ver la organización de las carreteras y los edificios -e incluso es posible usar Street View-, a medida que acercamos el zoom las imágenes se van difuminando.

Palacio de la Zarzuela

En el caso del Palacio de la Zarzuela, la vista aérea que muestra el servicio de Google Maps aparece distorsionada, después de que en 2013 el entonces Gobierno del PP abogara por ocultar algunas zonas sensibles en los mapas de Google por seguridad ante posibles ataques terroristas.

Frontera de México con EEUU

En un tramo de casi 25 km, entre Ciudad Juárez y el Condado de Hudspeth, en Texas, la frontera entre ambos países aparece de forma poco definida en Google Maps.

Agencia de Seguridad Nacional de Taiwan

Google Maps impide por motivos de seguridad acercar mucho el zoom a este complejo, donde se concentran los servicios de inteligencia.

Base aérea de Torrejón de Ardoz

Como en el caso del Palacio de la Zarzuela, otras instalaciones 'sensibles' cuyas imágenes han sido pixeladas o difuminadas son por ejemplo las de la base de Torrejón de Ardoz, la de Rota o la sede del Centro Nacional de Inteligencia.

Parque Tantauco (Chile)

El buscador no ofrece una vista detallada del Parque Tantauco de Chile, un parque privado de cerca de 118.000 hectáreas abierto al público ubicado en la Isla Grande de Chiloé, Región de Los Lagos en Chile. En este caso, la aplicación de Google Maps no permite acercar el zoom.

Islas Feroe

Las 18 islas rocosas volcánicas que conforman este archipiélago tampoco son visibles con la nitidez que sería deseable. Con el humor por bandera, los habitantes de las Islas Feroe decidieron en su día poner en marcha el proyecto Sheep View 360, para crear un mapa de las carreteras y los enclaves del archipiélago colocando cámaras en el lomo de sus ovejas.

La residencia de Carles Puigdemont

Aunque la mayoría de veces la razón de que se muestra un determinado espacio de forma pixelada se debe a motivos de seguridad, en algunas ocasiones son los propietarios o inquilinos de un determinado edificio los que piden a Google Maps que no los muestre de forma definida. Es el caso, por ejemplo, de la vivienda en la que Carles Puigdemont reside en Waterloo (Bélgica). Todo indica que el expresidente catalán fue quien pidió que se difuminase la imagen de 360 grados de la casa, molesto porque esta apareciera en los medios de comunicación.