La vida de Efraín cambia totalmente cuando su padre se marcha a trabajar a la ciudad y se ve obligado a trasladarse a vivir con su abuela y sus tíos. Con su único e inseparable amigo, un pequeño cordero, Efraín intenta adaptarse a su nueva famlia, cocinando ricas empanadillas samosas y trabajando en el campo. Cuando la vida de su cordero corre peligro, Efraín aprende que la amistad y la familia son cosas por las que merece la pena luchar.