Durante el invierno, dos jóvenes viajan a una cercana ciudad de costa. Martin va a visitar a unos parientes para obtener un documento para su padre. Tomaz se suma al viaje, viéndolo como la oportunidad de reiniciar su amistad. Los dos pasan estos días sumergidos en su propio universo, presenciando el rechazo de la familia de Martin y atisbando la distancia extraña que hay entre ellos. De los acontecimientos casuales hasta llegar a profundas meditaciones sobre sus vidas y su amistad, los chicos se refugian en este trance como en un invernadero a la orilla de un mar frío y turbulento.