El entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, sigue fiel a su razonamiento de que desbancar de la primera plaza liguera al Real Madrid de José Mourinho es poco menos que misión imposible. El de de Santpedor ha asegurado que ni siquiera una victoria este sábado en el clásico sería decisivo. "Ganando mañana estaríamos a un punto pero incluso así con un equipo como el Real Madrid que ha perdido y pierde tan pocos partidos sigue estando en sus manos cerrando los partidos.