El expresidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, se ha desvinculado del desvío de 8 millones de euros que está investigando la Operación Soule y por la que estaba citado a declarar en la Audiencia Nacional este lunes. Lo mismo ha hecho Raúl Masso, exsecretario general del Comité Técnico de Árbitros (CTA). Victoriano Sánchez Arminio, expresidente del CTA, citado en la misma causa se ha negado a declarar ante juez Alejandro Abascal, que investiga a la anterior cúpula de la RFEF.