Miles de aficionados belgas están disfrutando en Lyon con la previa del partido entre su selección e Italia. Y lo hacen bebiendo cerveza en los bares y terrazas de la localidad francesa, a pesar de la prohibición del Gobierno francés de ayer domingo de que no se puede vender ni consumir alcohol en las zonas "sensibles" la víspera y los días del partido en la Eurocopa.