Los aficionados españoles 'han tomado' el centro de Atenas. Allí juega la selección esta noche la primera de las dos finales de la semana en busca de la clasificación para el Mundial. La victoria es imprescindible para conseguir la clasificación directa para Qatar, pero hay colchón: la repesca, como mal menor, está asegurada, y el equipo español depende de sí mismo.