Chimy Ávila es uno de los mayores ídolos de la afición de Osasuna en los últimos tiempos. Sus goles y su capacidad de lucha hicieron que los aficionados rojillos se encariñaran rápidamente con él. Dos durísimas lesiones cortaron su meteórico crecimiento que de nuevo esta temporada está volviendo a verse en El Sadar. El 99% de la grada pamplonesa le adora y le anima en cada una de sus jugadas, como es normal, pero hay un pequeño grupo de radicales que no le perdonan que hace meses posara con una camiseta en la que salía una frase con la que se siente identificado y la cara de Santiago Abascal, líder del VOX. Él, que no sabía de quién se trataba, vistió la prenda por el mensaje que portaba y a los pocos minutos de colgar su foto en sus redes sociales se hizo viral, siendo criticado por muchos seguidores radicales que en algunos casos no atendieron a sus disculpas posteriores y desde entonces no le perdonan una.

Aunque marque el gol de la victoria o que signifique un empate sobre la bocina contra el FC Barcelona. Hay que recordar que en el grupo ultra de Osasuna (Indar Gorri) prima una ideología de extrema izquierda muy próxima a Bildu, lo que les coloca en el lado opuesto al partido conservador de Abascal. Al celebrar el argentino su gol con la valla del fondo, la mayoría de aficionados allí concentrados lo celebraron como se merecía, pero unos pocos que preferían la derrota de Osasuna al tanto de su delantero. Atención a sus violentas reacciones.