Chukwueze da una victoria balsámica al Villarreal (2-1)

Los amarillo tuvieron que remontar el gol de de Enes Unal al inicio del partido

Los jugadores del Villarreal celebran uno de los goles del partido

Los jugadores del Villarreal celebran uno de los goles del partido / EP

Rafa Jarque

Rafa Jarque

Llegó la victoria que el Villarreal tanto necesitaba. Tras cuatro partidos mordiendo el polvo, los de Setién se llevaron tres puntos clave a pesar de comenzar el partido por detrás en el marcador. Unal encogió el corazón de La Cerámica en un puño, pero Chukwueze se echó el equipo a la espalda y remontó gracias a un gol y una genial asistencia. 

El miedo de encadenar la quinta derrota consecutiva en liga pareció apoderarse de la plantilla del Submarino en los primeros compases del partido. Imprecisiones, posesiones estériles y poca solidez defensiva. Especialmente en los centros al área del cuadro azulón. De hecho fue así como llegó el primer tanto del partido. Ese que desató de nuevo un mar de dudas en la grada de La Cerámica. El balón quedó dividido tras un choque entre dos futbolistas, Djené se hizo con el control del mismo y puso un centro medido que Enes Unal no desperdició. El delantero turco le ganó la partida a Raúl Albiol y Pau Torres y su remate no lo pudo atajar Pepe Reina. Se revisó una posible falta previa a Yeremy Pino pero el VAR no vio nada punible. 

Cero a uno en el luminoso y volvía el murmullo a la grada. Incluso se escuchó algún pito en una jugada lenta y atascada del Submarino, pero fueron muy leves y se diluyeron muy pronto. El equipo de Setién entró en una fase del partido en la que era incapaz de crear peligro sobre la portería de David Soria. El Getafe, que daba por buenísima la victoria por la mínima, montó el autobús y esperó su oportunidad de ampliar la distancia a la contra, pero la realidad es que no disfrutaron de ocasiones peligrosas. Tampoco el Villarreal, y eso era lo preocupante. El cuadro amarillo amasó el balón como si romper líneas no fuera necesario. En ocasiones lo intentaba, con Dani Parejo y Ramón Terrats como los principales agitadores de un choque que estaba adquiriendo un tinte horizontal. 

La defensa azulona había montado un muro infranqueable que mostró una rendija al filo del descanso. Una jugada hilada por banda izquierda terminó con un remate de Capoue que detuvo David Soria. El balón quedó muerto dentro del área y Samu Chukwueze, a puerta vacía, empató el partido justo antes de que Figueroa Vázquez mandara a los jugadores a vestuarios. 

Marcha más tras el descanso

El Villarreal comenzó la segunda parte mostrando una mejor cara que la ofrecida en la primera parte. Chukwueze se estaba erigiendo como el salvador del equipo, siendo el único futbolista capaz de poner en apuros a la defensa del Getafe. El futbolista nigeriano se echó al equipo a la espalda y se inventó una jugada que permitió a Morales poner por delante al Submarino. Samu caracoleó por derecha, dejó en el camino a varios defensores y sirvió un gran balón para que el exgranota rematara a placer al fondo de la red. El Villarreal mandaba al inicio de la segunda parte a pesar de jugar sin brillantez. 

El segundo gol solo le sentó bien a los locales durante diez minutos, que fue el tiempo que aguantó el equipo de Setién sin sufrir. En el ecuador de la segunda parte el Villarreal echó un paso hacia atrás y el Getafe aprovechó para encerrarar equipo amarillo en su área durante varios minutos. Enes Unal y Borja Mayoral fueron los que avisaron de forma más seria. El delantero español incluso estrelló un derechazo en el larguero. El turco, por su parte, trató una falta directa desde el lateral que cerca estuvo de sorprender a Pepe Reina. Ni rastro del Villarreal en ataque. 

En el último minuto el Getafe reclamó un penalti sobre Unal tras un córner. Tras unos pocos segundos en los que La Cerámica encogió su corazón en un puño, el colegiado pitó el final. El Villarreal vuelve a ganar, con mucho sufrimiento, pero se lleva unos tres puntos balsámicos que dan aire a Setién y devuelven al Submarino a la lucha por las plazas europeas.