Me pregunto si Peter Lim sabe que en su nombre hay gente en el Valencia que va cacareando que tiene a Albelda y Cañizares entre los candidatos a gestionar el club en un futuro inmediato. Ya he dicho alguna vez y lo repito hoy, que no me importan los nombres, que solo me importa que sea quién sea, tenga autonomía y entienda de fútbol porque en esas condiciones el Valencia estará más cerca del acierto que del error, pero lo que ocurre es que no estoy hablando de un ´casting´ de directores deportivos, hablo de qué se cuece en una parte del Valencia. Repito, estoy dispuesto a olvidar el pasado y tratar de construir en el presente un futuro mejor para el Valencia, sea quien sea el elegido o los elegidos, y estoy dispuesto a ello porque solo soy un periodista, nada más, no tengo la intención de imponer mi criterio al club bajo amenaza de chantaje. ¿Quién soy yo para decirle al Valencia a quién ha de poner? Tengo mi opinión y no va más lejos, como la canción de Leño. Pero pasa que no me puedo callar ante determinadas situaciones que emanan desde dentro del Valencia.

El aficionado tiene que saber algunas cosas, como por ejemplo, que a mí, como periodista, me sale gratis criticar a Layhoon o a Peter Lim. Absoltuamente, nadie, y lo digo bien claro, ABSOLUTAMENTE NADIE, me ha dicho nada cuando critico a la presidenta del Valencia o a su propietario. En cambio, hay empleados, como por ejemplo DamiàVidaganay, que sí han reaccionado a través de mensajes de wasap o llamadas telefónicas cuando he dicho que ellos fomentaron y aplaudieron un linchamiento público de un ejecutivo del club, algo que un empleado ha admitido en público. Si los señalas a ellos reaccionan, si señalas al dueño o a la presidenta o a un jugador, ellos, que trabajan para el Valencia, callan. Ahora, cacarean a quien les quiere escuchar interesadamente que tienen ya la solución para la temporada que viene aunque sea a costa de decir implícitamente que Peter Lim es tan súmamente burro que está dispuesto a poner en el Valencia a gente que lo ha desprestigiado en público, y esto no es culpa de Albelda o Cañizares -si el club les hace una propuesta aceptarán o no-, que quede muy claro este concepto, es culpa de quien es capaz a de todo con tal de mantener su cuota de poder. Respeto el poder de Lim para decidir porque se lo ha ganado a golpe de talonario pero hasta que no lo vea no lo creeré.

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