Bueno, pues se acabó la farsa. La noche de paz en el mundo, la noche de amor universal, la noche del pavo al horno y el cuñado brasa, los gritos entre hermanos y, por encima de todo, los niños desatados. Ha venido Papá Noel, han venido los Reyes, y la cabalgata ya no es lo que era. En la de Valencia se empeñan en poner a bebés y niños de hasta cuatro años en las carrozas, y el impulso de los caramelos llega a los pies del carromato. Los caramelos son de los baratos, pocos palotes y gominolas y escasas monedas de chocolate. Por cierto, un año más la carroza del Levante UD fue más generosa que la del Valencia CF... ¡O yo siempre estoy mal ubicado!

Experimentos

Futbolísticamente hablando, el Madrid pasó por Mestalla y se llevó la estocada final para firmar el finiquito de su entrenador. Lo predije: somos el revulsivo. Era el peor momento para un resultado decente, pero lo conseguimos. Claro, que podríamos haber ganado si Negredo hubiera gestionado mejor el mano a mano final con Keylor Navas. Pero las consecuencias fueron peores en las filas contrarias. Entonamos tanto cántico a Benítez que le dimos el toque final al descrédito en la casa merengue. Las voces críticas allende nuestra provincia pueden apuntarnos a la afición de Mestalla otro entrenador más, aunque esta vez no fuera el nuestro. Y del mismo modo que nadie en los Madriles puede dar lecciones a nuestra afición sobre crítica con nuestros entrenadores, visto lo visto, aún menos nos pueden enseñar a gestionar un club.

Prueba-error

Se ha dicho que lo de Gary Neville es un experimento pero, si lo es, aún está más cerca de la prueba-error lo de Zidane. En cualquier caso, nosotros a lo nuestro, que nadie nos va a solucionar los problemas propios. Seguimos sin ganar en la Liga desde el día de Vigo, y sumar de uno en uno nos llevaría al desastre en cualquier Liga? Aunque esta competición es tan floja por la parte baja, que ahí estamos, en el ecuador de la tabla. Al menos, en Copa hemos dado un zurriagazo. El Granada nos aguantó un asalto, y Negredo puso un hat trick en el marcador, aunque para algunos los goles de penalti son menos valiosos. ¡Como si fuera sencillo meterlos! La portería la hace grande o pequeña la mente, no los metros. Que metiera dos seguidos habla bien de su confianza. Él mismo reconoció que su fallo ante el Madrid le tenía reconcomido.

Bonus

Pero lo relevante es ganar en Liga, que es donde nos ganamos el sueldo. La Copa o la Europa League, en estos momentos, son un bonus del que no pueden depender otra cosa que no sean los sueños. Aun así, la Copa puede salvar un año negro. La principal deuda pendiente de este equipo „histórica, diría yo„ es la regularidad. Somos cal y arena, como somos blanquinegres. Debemos ser competitivos, que no es otra cosa que ser difíciles de batir. El estilo, ahora mismo, es lo de menos. Lo importante es puntuar ya. Para ello, tenemos que resolver la visita de hoy a Anoeta. La Real Sociedad en su casa y en pleno enero no es lo que se dice el vivero ideal para que críen los nuestros, pero estas cosas no se eligen.

Tour

¡Ah, Donosti, qué bonito lugar para un desplazamiento dominguero-futbolístico! El frío te despierta a las ocho de la mañana, quizá la mañana traiga txiri-miri. Desayunar en el Boulevard donostiarra es mágico, pero caro de narices, así que con un café con leche vas que chutas. Luego, un paseíto por la playa de la Concha hasta llegar a los pies de Monte Igeldo e incluso, si el viento lo permite, y acercarse para hacer hambre a ver a los surfistas en la playa de Zurriola, con los cubos del Kursaal al fondo de skyline, antes de adentrarse en lo Viejo, el barrio de pintxos por excelencia. No me iría sin pasar por el Martínez a probar el de txangurro. Lástima que el Bar Néstor esté cerrado hasta el 20 de enero, porque allí preparan ´El Chuletón´. Con mayúsculas. Pero todas las opciones son buenas para ponerte hasta el quico.

Bajas

Luego, bien cebaditos y aún temprano, esta tarde a las tres ya hay que rondar el estadio. Empaparse de la magia del entorno, con tintes ingleses, para hacer frente a un partido a cara de perro. No es una salida fácil, pero si alguien puede gestionarla bien son los Neville brothers más el insigne Angulo, que para mí es piedra esencial del proyecto. También es rentable para nuestros intereses que ellos lleguen entre algodones, como los nuestros: Illarra, Granero, Agirretxe o la desgracia de Canales. Qué gran jugador técnicamente, y qué mala suerte. A veces no nos damos cuenta de lo exigente que es este deporte, y el mérito que tiene mantenerse en el top de forma regular. Por nuestra parte, hay que encontrar una solución a la defensa en el mercado invernal. Alguien que muerda y dé miedo de frente y de perfil. Que le oigas pensar mientras te mira a la cara como hacía Ayala. Un crack. Porfa. Venga.

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