El keniano David Njagi, de 29 años, ha pulverizado el récord de la Maratón de Valencia con 2.09:45, crono que se sitúa históricamente como la segunda mejor marca en la distancia de los 42,195 kilómetros jamás realizada en suelo español. En mujeres, su compatriota Gladys Chebet invirtió un tiempo de 2.42:06 para ser la primera mujer en cruzar la línea de meta.

Puede decirse que el maratón de Eindhoven de 2009 ha sido la cantera de los campeones de Valencia. Si en noviembre, en el medio maratón que salió del Puerto, ganó Geoffrey Mutai, triunfador de los 42,195 kilómetros de Eindhoven, hoy otro de los protagonistas en aquella prueba holandesa, David Njagi, ha hecho trizas el viejo récord local de Philip Mayin (2.11.29), y ratifica, por si quedara alguna duda, la idoneidad del asfalto valenciano para la obtención de cronos de alcance mundial.

Con el cielo cubierto, unos 8 grados de temperatura en la salida, y amenaza de viento y lluvia, los 3.610 inscritos arrancaron desde el Paseo de La Alameda, recuperando el escenario de las primeras ediciones de la carrera.

De salida se formó un grupo de 10 corredores marroquíes, kenianos y etíopes formado por la primera liebre Abdellah Falil, seguido por el único europeo y también liebre, el francés El Hassane Ben Lkhainouch, por Tesfaye Sandiku, Berhanu Girma, Abraham Potongole, Fedaku Lemma, Joseph Langat, y los dos favoritos, Ben Kimutai Kimwole y David Njagi, que además eran los que mejores sensaciones transmitían dentro del pelotón. Todos ellos pasaron en 30:59 los 10 kilómetros. En solitario, Andrés Micó, el primer español y vencedor del año pasado, transitaba con tres minutos de retraso.

Por el ecuador de la prueba, el paquete cabecero marcó un tiempo de 1.05:16, y por el kilómetro 25, 1.17:00. Dentro de la prudencia que exige cualquier pronóstico en maratón, ya se podía pensar en el récord porque no se había descolgado nadie y el temido viento no acababa de despertar. Otro dato esperanzador es que todos los integrantes del grupo, pacemakers incluidos, habían acreditado sus mejores marcas personales en maratón en 2009, es decir, llegaban en un momento dulce de su carrera deportiva.

La lluvia apareció cuando los mejores atravesaban el muro de los 30 kilómetros (1.32:21). Acaba de señalarse el paso intermedio más rápido hasta entonces de 5 kilómetros (15:21). La cabeza iba de menos a más, y el récord, más que posible, era inminente.

Al filo del kilómetro 35 (1:17.25) David Njagi y Abraham Potongole se adelantaron con una fuerza brutal, completando un parcial de cinco mil jamás visto en el Maratón de Valencia de 15:04. Ni una catástrofe podía ya impedir la plusmarca de la prueba. Njagi volvió a cambiar de ritmo, esta vez de manera definitiva, seguido a 70 metros por Joseph Langat y Ben Kimutai Kimwole, el ganador del maratón de Mónaco, mientras Potongole perdió posiciones.

Los últimos tres kilómetros fueron una lucha en solitario de Njagi contra el reloj por bajar de 2.10 y batir el récord, objetivo que finalmente logró de forma holgada. Para hacerse una idea exacta del impresionante nivel de la carrera valenciana, patrocinada por Kelme, basta con decir que el segundo, tercer y cuarto clasificados, Langat (2.10:24), Kimwole (2.10:30) y Potongole (2.11:12), respectivamente, también corrieron por debajo del tope histórico valenciano. El primer español fue Miguel Ángel Plaza (2.26:54)

En categoría femenina, la keniana Gladys Chebet ganó de cabo a rabo, sin dar opción a nadie, tras pasar en solitario por el medio maratón en 1.17:32.

Llegaron a meta más de 3.000 participantes, la cifra más alta de finalización en las 30 ediciones de esta prueba. La alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, presidió la entrega de trofeos.