Laura Gómez, judoca del club de Judo Valencia Terra i Mar visitó SUPER unos días después de conquistar la medalla de bronce en el Campeonato de Europa disputado en Budapest, un éxito con el que se consagra entre las mejores del mundo.

Había ganado medallas en Grand Slam, en el Masters Mundial... pero le faltaba una medalla en una competición como el Europeo ¿es así?

—Sí, estoy muy contenta con esta medalla, llevaba tiempo luchando por ella y siempre me quedaba a las puertas. Me ha costado pero por fin lo he logrado, es un paso que ya tocaba dar en mi carrera. Sí es cierto que hasta ahora había logrado importantes medallas de Gran Slam, en el Masters...pero luego llegaba la hora de la verdad y había fallado tanto en el Europeo como en el Mundial. En Budapest me he quitado la espinita del año pasado en el que había perdido el combate por bronce. Soñaba mucho con una medalla de este nivel.

—¿Qué cambia esta medalla?

—A partir de ahora lo afronto todo con otra presión ya que hay veces que parece que si no tienes una medalla europea o mundial no eres nadie. En realidad no soy ni mejor ni peor que antes el Europeo pero tener este bronce en mi palmarés me permite ir a los campeonatos con otra actitud, con más ganas de ganar y menos miedo de perder.

—Esta medalla tiene un doble mérito ya que compitió mermada físicamente...

—En el primer combate me hice daño pero no lo noté en ese momento, al acabar empecé a vomitar, a encontrarme mal, porque había recibido un golpe muy fuerte en las costillas, en el segundo combate veía que no podía estar a mi nivel entonces ya empecé a hacer cálculos y me di cuenta de que yendo por el camino de la repesca tenía más opciones de alcanzar medalla ya que las competidoras se me daban mejor y así fue.

—Este bronce ¿le ayuda a cicatrizar la herida por no haber estado en los Juegos de Londres?

—De la decepción de no haber estado en Londres no te desquitas con nada pero sí es verdad que es un incentivo más para seguir trabajando. Tanto para mí como para mi equipo de trabajo no estar en Londres fue una tristeza muy grande, habíamos estado 4 años luchando en equipo y fue duro.

—¿Pero ha pasado ya página?

—Londres ya ha pasado, me alegro al menos de haber estado allí apoyando a mis compañeros, pero ahora ya pienso en Río. Mi objetivo es estar en los Juegos de Río 2016, a los que llegaré todavía con una buena edad (32), me quedan ahora 4 años para seguir sacando resultados buenos en los Europeos y Mundiales.

—Este año empieza un nuevo ciclo olímpico ¿cómo lo afronta?

—El año pasado fue muy duro porque tenía muchos torneos, sin apenas descanso para buscar la clasificación olímpica. Por eso este año me lo planteo de forma diferente, sin pensar en el ránking. Simplemente pienso en salir a competir y ganar, no por demostrar nada a nadie sino para lograr algún título para mi equipo.

—¿Contar con el apoyo de su marido, Sugoi Uriarte en todas las competiciones, le ayuda?

—Ayuda pero también presiona porque yo soy partícipe de los suyo y el de lo mío. El saca muy buenos resultados y no es fácil estar a su altura. En el Europeo no pudo competir porque estaba lesionado, lo habían operado 2 semanas antes de una bursitis.

—A usted y toda su generación le dejaron el listón muy alto sus predecesoras como Isabel Fernández, Almudena Muñoz...¿ha sido una presión añadida?

—Por suerte o desgracia nosotros hemos tenido que pelear mucho para ganarnos el puesto en el equipo nacional porque teníamos delante una generación muy buena. Por eso llevamos muchos años entrenando pero pocos compitiendo al máximo nivel.

—Con el bronce en el Europeo prácticamente se ha asegurado la presencia en el Masters Mundial,l competición en la que participan los 16 primeros del ránking mundial de cada peso y que se disputará el 25 y 26 de mayo en Rusia. ¿Cómo afronta esta cita?

—El Máster este año tampoco es un objetivo prioritario, es importante, porque te da muchos puntos para el ránking pero tengo claro que mis objetivos para este año eran el Europeo y ahora el Mundial que será en agosto y además, en Río.

—¿Está muy pendiente del ránking mundial o es algo secundario ahora?

—Desde el mes de abril del año pasado hasta ahora prácticamente no había hecho ninguna competición, por eso al no puntuar bajas en seguida en la clasificación pero es algo que ahora no me preocupa. Estos meses he estado entrenando en Japón, también aquí en Valencia con mis compañeros, el planteamiento es distinto.

—¿Se ha fijado los Juegos Olímpicos de Río como cierre de su carrera?

—Sí, mi objetivo es llegar hasta Río y después dejar el judo de competición pero desde luego seguiré en la parte técnica del club, ayudando a los jóvenes para que tengan su oportunidad, hay que dejar paso.

—¿Cómo ve el relevo generacional?

—Tenemos gente joven muy buena, no solo de cara a Río sino a los juegos de 2020.

—¿Cuál es la clave del éxito del Club de Judo Valencia Terra i Mar?

—En el club nadie cobra, ni los entrenadores ni nadie, el objetivo es sacar buenos resultados. Mi padre es el entrenador y tanto Sugoi como yo ayudamos en la parte técnica, me gusta ayudar a chicos y chicas jóvenes que quieren llegar lejos.