Este domingo 22 de octubre no fue una Media Maratón más. Había un motivo mucho más especial para todos los que corrían por Blas Gámez, el subinspector de la Policía Nacional que fue trágicamente asesinado mientras realizaba una investigación en la calle Sueca de la capital valenciana.

A falta de prácticamente doce minutos para que el cronómetro de la meta marcara las tres horas de competición, familiares y amigos, entre los que se encontraban compañeros de la profesión de Blas, entraron en meta junto a su mujer, Chus, y sus hijos, Álvaro y Pablo, que rompían a llorar por la emoción del momento. Entre abrazos y besos, Chus decidió enviar un beso al cielo a su marido lo que provocó que su gesto se fundiera con un sonoro aplauso.

La viuda del policía Blas Gámez entra en meta en el medio maratón Valencia

La viuda del policía Blas Gámez entra en meta en el medio maratón Valencia

El silencio de los aplausos se rellenaba tan solo con gritos de sus allegados, que no cesaban de repetir entre lágrimas: "Siempre con nosotros, Blas". Aunque Chus reconoció que le costó un poco la carrera por la parte del Ayuntamiento, lo que dejaron claro ella y todos los que este domingo decidieron acompañarla, es que esta "iba por Blas".

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