Juan Carlos Ferrero vuelve a una final de Roland Garros doce años después de levantar la única Copa de los Mosqueteros para el tenis de la Comunitat Valenciana en la pista Phillippe Chatrier de París. Luego de haber colgado la raqueta de forma profesional en 2012, el de Ontinyent disputará hoy la final del trofeo de Leyendas en la pista Suzanne Lenglen, junto a Carlos Moyá. Será poco antes de que Djokovic y Wawrinka luchen en la central por suceder a Nadal en un palmarés en el que Ferrero se ganó su sitio en 2003 al vencer al holandés Martin Verkerk, justo un año después de ceder ante Albert Costa.

Ferrero y Moyá superaron ayer el partido clave ante los anfitriones Sebastien Grosjean y Fabrice Santoro, a los que ganaron por 6-4, 3-6 y retirada de la pareja francesa por lesión en el muslo de Santoro. Dos días antes, se habían impuesto al estadounidense Michael Chang y Goran Ivanisevic por 6-3 y 6-3, en una auténtica final anticipada. Sus dos victorias en el grupo A de las leyendas de menos de 45 años les clasificaron para jugar la final ante los vencedores del grupo B, los galos Arnaud Clement y Nicolas Escude, superiores a los otros dos dúos: Sergi Bruguera y Gaston Gaudio por un lado, y Yevgeny Kafelnikov y Andrei Medvedev por otro.

«Qué bien sienta volver a pisar estas pistas. Gran partido junto a Charly Moyá», dijo Ferrero a través de su perfil en las redes sociales, mientras disfruta estos días de París con su mujer Eva Alonso y su hija Vega, y a punto de pelear por un nuevo título tres años después de su retirada. Y es que es precisamente en la capital francesa donde Ferrero tiene mejores números, con 34 victorias y once derrotas en Roland Garros, donde conquistó el único Grand Slam para el tenis valenciano, algo que David Ferrer acarició hace dos años ante Rafa Nadal. Un título y una final posterior en el Abierto de EEUU que le llevaron a ser número uno del mundo ocho semanas, algo inaudito en el tenis valenciano.

Ferrero hace pareja en París con Carlos Moyá, como él campeón de Roland Garros en 1998 y número uno de la ATP un año más tarde. Enfrente tendrán a Arnaud Clement, que llegó a ser número 10 de la ATP y tres años mayor que el de Ontinyent, y contra el que jugó tres veces en su carrera „un triunfo y dos derrotas„, las mismas que ante Nicolas Escudé, de 39 años, pero con la balanza justo al revés.

Ferrero se retiró en 2013 en el Valencia Open 500, torneo del que es director desde entonces. Lo hizo con un emotivo dobles junto a David Ferrer, tras 16 títulos y 18 finales individuales en su carrera, y tres Copas Davis, la primera para España en 2000, la de 2004 y la de 2009, en la que no jugó la final aunque fue clave para alcanzar la misma.