El Valencia Basket realizará este verano una reforma interior en el pabellón de la Fuente de San Luis que, entre otras cosas, supondrá darle una mayor uniformidad cromática al recinto, pues casi todas las sillas pasarán a ser de color naranja.

El club, que vinculó esta iniciativa a la celebración de su treinta aniversario, explicó que el coste de la reforma será de unos cuatrocientos cincuenta mil euros y que lo abonará la entidad en su totalidad, como ya ha hecho en casi todas las reformas que ha realizado en la instalación.

Al tratarse la Fonteta de una instalación municipal, el club ha contando con la aprobación y el respaldo técnico tanto del Ayuntamiento como de la Fundación deportiva municipal.

El club ya había anunciado la sustitución de las banquetas que había en las dos gradas de canasta por asientos con respaldo y ahora ha explicado que cambiará otras dos mil localidades, de la tribuna curva y preferente, y que también pasarán a ser de color naranja.

Del mismo modo, el club pintará de naranja los asientos de la tribuna, excepto unas sillas que serán blancas y servirán para inscribir las iniciales de la entidad (VBC). Sólo la zona VIP mantendrá sus asientos negros.

Además, según el proyecto diseñado por la empresa valenciana MolcaWorld, la entidad ampliará esta uniformidad cromática en todos los sectores del pabellón así como en los aseos, las escaleras y los pasillos de distribución. El objetivo del club es que la reforma está acabada casi en su totalidad para el arranque de la temporada que viene.