«No hay un acomodo con esa línea de juego (4-3-3)». Hasta el mismo Unai Emery reconoció la evidencia a la conclusión del amistoso frente al Almería, al ser preguntado por el pobre partido que ofreció su equipo en el final de la pretemporada. En el estadio Juegos Mediterráneos el técnico vasco utilizó por primera vez desde el inicio el 4-3-3, pero los blanquinegros se atascaron con el balón. La imagen ofrecida se alejó abismos de la mostrada sobre la base del clásico 4-2-3-1, por ejemplo, contra el Sporting lisboeta y el Roma.

El VCF ha arrasado con el 4-2-3-1 en acción

El Valencia finaliza los partidos de pretemporada con un balance de cinco victorias y tres derrotas. Si bien es cierto que el 4-2-3-1 no resultó ni en Viena ni en Liverpool, no lo es menos que la totalidad de los triunfos y los mejores momentos se han fraguado con la manera de juego a la que está más acostumbrada el equipo; es decir, haciendo uso de dos mediocentros y un enganche en la zona ancha del terreno. Así se venció al PSV, se encarrilaron las victorias ante Leicester y Hamburgo, se dio una exhibición con tres goles en 45 minutos en el Jose Alvalade o el pasado sábado se llegó al descanso con 2-0 y arrasando al Roma.

Unai apostó por cómo acabó contra el Roma

El técnico del VCF reconoció en Almería que no acaba de ver cómodo a los suyos con el 4-3-3. «Hay momentos… Contra el Roma, Parejo y Éver dieron un cambio necesario y posesión. Contra el Almería desde inicio ha habido alguna cosa buena, pero otras, no… No hay acomodo con esa línea de juego». Sin embargo, lo que pretendió ayer Emery es que el Valencia siguiese la pauta con la que acabó la presentación. Contra los italianos Topal, Parejo y Banega se juntaron desde el minuto 62. El Valencia dominó el balón y culminó un notable partido con el 3-0, obra de Alcácer. Los tres repitieron de inicio en Almería, pero la historia fue otra.

Topal se multiplicó en las ayudas al lateral

Del trío en la medular, al que se observa más adaptado al 4-3-3 es a Mehmet Topal. El turco se desenvuelve con soltura unos metros por delante de los centrales. Frente a los rojiblancos, aparte de cubrir las espaldas a los volantes, tuvo que ir una y otra vez a la ayuda para cubrir las subidas de los laterales. Parejo, al que lógicamente aún le falta adaptación al funcionamiento del equipo, estuvo más perdido y sin profundidad que Banega, quien, según Emery, sí dispuso de momentos de «claridad». Precisamente, el argentino fue el único que hizo funcionar el ´trivote´ en la recta final en Liverpool.

Con Feghouli, mejora y vuelta a lo clásico

En el 62´ Feghouli entró en lugar de Dani Parejo, dando paso al regreso al 4-2-3-1. Jonas dejó el extremo diestro, donde no se le vio cómodo, para hacer de mediapunta. Fueron los mejores minutos hasta la expulsión de Aduriz.