PARTE I. El equipo, el proceso de venta, la llegada de Peter Lim, su futuro en la presidencia... Esta entrevista habría dado para un periódico entero hablando del Valencia, desvelando uno tras otro los planes de Meriton para el futuro del club, aunque el futuro que preocupa ahora mismo a gran parte del valencianismo no es ya el del Valencia, sino el del propio Amadeo Salvo.

Tenemos curiosidad por saber cómo fueron las horas decisivas de ese proceso de venta.

Bueno, pasó que desafortunadamente Bankia no quiso firmar en Valencia, no entendimos en su momento por qué no puede firmar en la ciudad donde tiene su sede social, pero tampoco el Valencia CF y la Fundación quisimos generar ningún problema. También se planteó la noche anterior que fuera en Madrid y yo me negué, dije que la compraventa del Valencia tenía que ser aquí, en la sede del Valencia. Bankia lo aceptó y así que nos dividimos, estuvimos todo el día en Madrid, yo esperando porque tenía que firmar la reestructuración de la deuda, y todos esperando la revisión de detalles entre los abogados de Bankia y Meriton.

¿A qué se debió el retraso hasta casi la medianoche?

La revisión final se hizo primero en inglés, luego se tradujo al castellano y ocurre que siempre en las traducciones hay interpretaciones que son diferentes al sentido que se le dio en inglés. Se llegó a un acuerdo y nos fuimos a la notaría a las seis de la tarde. En la notaría se tuvo que volver a revisar todo aquello que se había discutido durante el día, hubieron algunos temas que no se habían reflejado bien, pero no por mala intención sino porque son contratos muy densos, y otros en los que seguían habiendo algunas pequeñas diferencias incluso después de que se habían hablado, pero así y todo al final se cerró todo. En ese momento en que se llegó al acuerdo llamamos a Valencia para que se procediera porque Bankia pidió que la firma de la venta fuera anterior a la firma de la refinanciación. Sobre las once y media ya había acuerdo absoluto y la firma fueron apenas cinco minutos.

¿Hubo algún inconveniente más, pudo haberse dado marcha atrás incluso el último día?

Bankia fue la que envió la notificación a Meriton para firmar el viernes a las doce del mediodía, el Valencia CF a las once de la mañana ya estaba en Madrid y los patronos estaban dispuestos a viajar a Madrid, pero dijimos que no, que la venta se firmaba en Valencia. Esto fue como el último fichaje del mercado, hasta el último minuto, pero estaba claro que en el momento en que Bankia y Meriton ya ponen fecha y hora es porque se iba a cerrar, si no hubiera sido a las once y media del día 24 hubiera sido a las cinco de la madrugada del día 25, pero de ahí no se levantaba nadie sin firmar.

Después de todo lo que Salvo le ha dico a Bankia en estos meses, ¿qué cara le pusieron en el momento de la firma?

No, bueno esa no es mi interpretación, yo no les he atacado tanto ni tengo nada personalmente contra nadie de Bankia, lo único que...

Hombre, habló de que Bankia ponía trabas, que tenía intención de vender el Valencia a sus amigos, que estaban haciendo un ridículo espantoso y que sus negociadores tenían poco nivel...

Dije todas esas palabras porque así lo creía y en el momento en que lo dije era así. ¿La cara con que me miraban? Normal, la verdad es que tampoco hablamos mucho, nos saludamos de forma educada y poco más. Estuvimos prácticamente en habitaciones diferentes hasta que llegó el momento de la firma y se firmó. También firmamos con La Caixa y el trato con ellos es excelente, fue todo muy rápido. La situación con Bankia fue correcta, no de amigos pero tampoco de enemigos.

Dentro de la estrategia que se ha seguido, ¿alguna vez temió de verdad que todo fuera por el aire?

Ha habido dos momentos muy críticos, uno en el mes de junio cuando el contrato de la Fundación. Temí porque él estaba muy cerrado, ese mismo día reciben el contrato de la Fundación en que si no cumplía cualquiera de las condiciones, por muy irrelevante que fuera, tenía que pagar doscientos millones de euros. La gente de Peter Lim dijo en ese momento que una entidad que no puede dar garantías tampoco puede pedir garantías de ese tipo. Ahí sí que temí que se rompiera. Meriton, que ya había hecho la Due Diligence, no iba a poner ni una sola contingencia porque entendía que es una Fundación donde los patronos bastante responsabilidad tenían con cargar con ésto. Ni ayudas del estado, ni Newcoval ni Porxinos ni la demanda contra la ampliación y gestión de antiguos administradoresde de Andrés Sanchis. Pero entonces es cuando Peter Lim dice ahora es cuando voy a exigir yo estas cuatro contingencias si quieren que compre el Valencia. Hay que tener en cuenta que lo que él compra son las acciones del Valencia CF, no la Fundación ni los compromisos de la Fundación.

¿Y la segunda vez?

La segunda vez que lo vi mal fue cuando las garantías adicionales. Ellos no lo entendían, nunca les había pasado en operaciones en muchas partes del mundo y con importes incluso superiores a este que una garantía personal ilimitada de Peter Lim en un país como España y en un banco como Bankia no valía, porque garantía personal iliminata es que respondes con todo tu patrimonio. Ese fue el punto y cuando nosotros fuimos allí lo que se valoró fue que por aportar 140 millones en garantías no se podía dejar de cerrar una operación que ya estaba tan adelantada.

¿Fue difícil convencer al inversor de que no abandonase?

Es que cuando por un lado se le piden cien millones de euros más otros cien, el mismo día recibe el escrito de Newcoval solicitando 87 millones y después Bankia le comunica que los términos del acuerdo no valían y necesitaban 200 millones más en garantías el hombre piensa que hay algo por detrás y que en Valencia no quieren que continúe con la compra. Es lógico que una persona que está a tantos miles de kilómetros piense que no quieren venderle el club y no saben cómo decírselo.

¿Y lo había algo por detrás?

Por parte de la Fundación no, ellos fue por exceso de celo porque al fin y al cabo estaban vendiendo el Valencia CF. Luego a los cuatro o cinco días rectificaron.

¿De verdad fue importante la reacción popular, en la calle y en las redes sociales, en favor de Lim y contra Bankia para que todo llegase a buen puerto?

Todo influyó, claro. La afición ayudó y ayudó muchísimo, también el hecho de que él confiaba en la gente que estábamos aquí. Recuerdo que cuando fui a Singapur él dijo ´sí Amadeo, yo sé que la gente está muy identificada con el club y quiere que llegue un nuevo dueño con un proyecto deportivo, que se invierta, eso ya lo sé´, porque ellos leen la prensa, pero es que no le dejaban salida. Entonces es cuando él puso las cuatro contingencias, que en principio no las iba a poner. Y al final ha sido la mejor decisión que hemos tomado todos, limpiarlas, porque si no hubieran estado ahí y la gente no hubiera sabido que teníamos una espada de Damocles de 160 millones de euros por una sentencia del Tribunal Supremo que además no es recurrible, y eso podía arrastrar al Valencia a la ruina. Yo como presidente del Valencia me comprometí a solucionarlas y la Fundación lo entendió como algo lógico.

Usted que estuvo a su lado, ¿qué sintió Peter Lim al ver el recibimiento de la afición en Valencia?

Es una persona muy llana, yo le conozco y estaba muy contento. Se quedó impresionado, preguntó si la afición siempre era así y le dije que últimamente sí, que no habíamos hecho ningún llamamiento porque venía Peter Lim, que la gente le agradece mucho la ayuda con los futbolistas, su perseverancia. También le gustó mucho cómo ha quedado Mestalla.

Se les vio hablar algunas veces durante el partido, ¿de qué?

Comentamos algunas jugadas, él habló del gol del alemán, de Gayà...

¿Y qué decía de Gayà?

En general preguntó por los jugadores de la Academia, pero los conoce a todos. Hay que tener en cuenta que Peter Lim es un loco del fútbol, se ve todos los partidos del Valencia aunque sea a las cuatro de la mañana. Nombró a Gayà pero él es muy de todos. Durante el partido la verdad tampoco hablamos mucho, luego en el descanso le presentamos a todos los consejeros, a los patronos, a todos los responsables de área del club y la verdad que estuvo muy amable y se hizo fotos con todos.

¿El hecho de que su visita al Nou Mestalla fuera su primer paso en Valencia es casualidad?

No, no, es que cada vez que he estado con él siempre me pregunta por el nuevo estadio, por el proyecto inicial, la modificación posterior. A él le encanta Mestalla, siempre dice que es como Anfield y cada vez que entra en Mestalla se enamora más, pero también sabe que comercialmente el futuro del Valencia CF está en otro sitio. Quiso que fuera alguien bien de la casa, alguno de los arquitectos o de la UTE, y fue Christian Schneider que es el que lleva el tema del futuro estadio el que le explicó absolutamente todo.

¿Y qué le pareció sobre el terreno el estado de las obras y el estadio en general?

Hay algunas cosas que le gustan mucho, otras que las trataremos con Mark Fenwick para posibles pequeñas variaciones. No son elementos estéticos, habla de elementos que afectan a los ingresos, el hospitality, cuestiones de visibilidad. No teníamos mucho tiempo, hablo de construcción, de accesos, de la zona comercial... Lo que quería es meterse en su cabeza el estadio para cuando lleguen los proyectos tener muy claro cómo es todo.

Y el segundo paso fue presentarse a los jugadores.

Es lo que le interesa de verdad, a veces hablamos de cuestiones financieras y demás pero a él lo que le gusta es el fútbol. Comimos con ellos, siempre muy respetuoso antes le preguntó a Nuno si había algún problema. Los jugadores siempre comen en su mesa todos juntos, que por cierto hay una armonía impresionante, y luego en la otra mesa estábamos nosotros. Simplemente quiso conocerlos. Les dijo que era un día muy feliz para él y que supieran valorar bien en el club que están. Luego fuimos a Mestalla y a dar una vuelta por Valencia, la playa, el puerto, la tienda del centro y un recorrido por el centro histórico, quería ubicarse.

¿Y después fueron a casa de los padres de Amadeo Salvo?

Me sorprendió, mientras estábamos comiendo me preguntó si mis padres vivían en Valencia y si podríamos ir a verlos. Es que es una persona increiblemente próxima, súper normal, agradable. A donde va es bien recibido y todo el mundo habla bien de él.

Y por ahí estamos llegando ya al tema que no va a conseguir que pasemos por alto...

No, no, allí no se habló de eso. Es un tema que él ya lo sabe porque ya se lo había dicho yo a él, a Lay Hoon y a Kim... Para ellos no es ninguna sorpresa.

Pero para la gente, para la afición en general, sí fue una sorpresa escuchar a Salvo decir que quizá no siga en el Valencia. Los tiene en un sinvivir...

Yo lo dije y lo vuelvo a repetir, es un honor estar aquí en el Valencia pero no ya como presidente, sino solo por estar en esta casa, pero cuando tú ves que es una situación en la que tienes que dejar algo que quieres mucho, algo que tú has creado durante 27 años de tu vida, entonces tienes que tomar una decisión. No quiere decir que nuestra empresa se vaya a caer si no estoy, pero vas a estar una etapa de tu vida fuera de ahí y no sabes cuánto. Lo que no puedo es estar aquí, porque un club de fútbol moderno te absorbe muchísimo, y estar en otro sitio donde al final prácticamente no estás. Compaginar al cincuenta y cincuenta no es posible. Es un tema que tengo que valorar porque al final lo otro es lo mío. Y no quiere decir que yo renuncie, porque yo seguiré siendo dueño de Power Electronics, podré volver cuando quiera, eso lo tengo claro y nadie me lo va a prohibir, ni siquiera el propio Peter Lim. Ellos saben que es una decisión que tengo que tomar y que no me mueve ningún otro interés, si fuera por un conflicto económico no me movería de Power, sería imposible. Es otro tema, en una empresa de tecnología dejas de estar cuatro o cinco años y cuando vuelves estás fuera. Yo tengo unos hijos que dentro de cuatro o cinco años empiezan a entrar en la empresa, que a lo mejor no quieren, pero a lo mejor sí y a mí me gustaría estar ahí. Y a lo mejor estoy pero no es lo mismo que vivirlo en el día a día y eso es lo que estoy valorando porque me gusta mucho.

¿Se va a demorar mucho la decisión?

En dos o tres semanas tomaré una decisión. Soy partidario de una cosa, la vida te enseña el camino, o sea, habrá alguna señal o algo que me dirá lo que debo hacer. Hay veces que cuando no sabes qué hacer lo mejor es quedarte como estás y esperar. Y si sigues con esa duda, cuando no hay más remedio hay que decidir.

¿Y no le da pena dejarlo después de haber peleado tanto durante este año y pico?

Lo que está claro en que en el caso de que me marche siempre estaré a disposición de Peter Lim para ayudarle en lo que quiera, en lo que necesite, el tiempo que haga falta, y si decido quedarme será con la condición de que mi casa está en otro sitio y a lo mejor en algún momento tengo que volver.

¿Y qué dice Lim de esto?

Él es un empresario como yo, con más nivel o más repercusión mundial, digamos de mayor volumen, pero él lo entiende porque es un empresario, en realidad es el que más me entiende.

Pero, por lo que sabemos, Lim le ha pedido que se quede, ¿no es así?

Sí, hombre, lógicamente él quiere que me quede y yo de alguna manera le ayudaré, él ha apostado mucho por el Valencia CF.

Usted verá, pero es difícil imaginar peor inicio de la etapa Lim en Valencia que perdiendo a Salvo.

Pero no sin Amadeo Salvo porque no quiera contar con Amadeo Salvo. Él sabe que hay gente muy válida en el Valencia, los responsables de área van a ser los mismos, los ejecutivos son los mismos y dices, sí, falta la cabeza de arriba... No sé, ya veremos.

Se nota que empieza a agobiarle que le pregunten por lo suyo.

Sí, me agobia porque hay días en que pienso que podría estar dos o tres años haciendo un proyecto bonito, un proyecto de un Valencia campeón, y me apetece. Y hay días en que pienso que me estoy perdiendo un proyecto de una nueva expansión internacional de mi empresa, tenemos una nueva división que hemos creado... Es que a veces tengo la sensación de que me lo estoy perdiendo todo. Y me lo estoy perdiendo todo por algo que tarde o temprano dejará de tener éxito para que empiecen las críticas, y esto pasará porque es fútbol. Entonces tengo que valorar eso. Ya estoy acostumbrado a las críticas pero tenéis que entender cuál es la situación, y después de hablar con él en dos o tres semanas decidiré.

Habla de dos o tres semanas para tomar una decisión, pero después de ver la encuesta en SUPER en la que el 94% de la afición quiere que siga, no sé si la gente va a poder esperar tanto tiempo...

Eso se lo tengo que agradecer mucho a la gente, siempre digo que es la satisfacción del deber cumplido, de haber trabajado bien. Si yo no hubiera sentido eso en la calle, sobre todo en la gente joven que son el futuro, si no hubiera sentido ese cariño de la gente ni me planteaba seguir, pero la afición es al final para quien trabajamos y ahora está contenta, si no estuviera contenta no tendría sentido seguir. A partir de ahí, será lo antes posible y bastante antes de la Junta General Extraordinaria, diez o doce días antes lo anunciaré.