Hace unos días el periódico 'La Provincia' destapaba que la raíz del conflicto entre Quique Setién y los dirigentes de la UD Las Palmas, epecialmente, con el presidente, Miguel Ángel Ramírez. Según el diario grancanario, después de una temporada y media de éxitos al frente del equipo, el entrenador consideró en las negociaciones de renovación que había hecho méritos suficientes para tomar más decisiones, tanto en materia de altas, bajas y renovaciones, como en otras de carácter interno. En esta encrucijada, según lo publicado, el presidente se decantó por reforzar a la dirección deportiva del club, la misma que había fichado a Quique Setién empezada la temporada 15/16.

El pasado lunes Miguel Ángel Ramírez confirmó esta versión de los hechos en una entrevista concedida a 'Canarias en Hora' y cargó contra el técnico al señalar la voluntad de Quique Setién de injerir en las tareas de la dirección deportiva y los fichajes. Esto es lo que dijo el presidente de Las Palmas, íntegramente, sobre las diferencias insalvables para renovar a un entrenador, Quique Setién, que oposita al banquillo del Valencia CF para la próxima campaña 17/18Valencia CF.

"Nosotros queríamos contratar a un entrenador y estaba identificado, era Quique Setién. Quizá, el míster, además de ser entrenador quería hacer más cosas. Estamos perfectamente estructurados con la dirección deportiva, clave importante del éxito del club y estar ahora en Primera con los jugadores que tenemos.

No podíamos solapar el trabajo del técnico con la comisión deportiva y viceversa. Son figuras importantísimas en un club. También tiene muchísima importancia que quede claro cuáles son las competencias de uno y otro. Dentro de ese margen de trabajo, que entendemos que es el mejor para el club, chocamos frontalmente con las expectativas del entrenador.

Siempre desde la mejor predisposición, él creía que eran competencias que podía asumir. No estoy diciendo que quería ser el director deportivo, pero sí tener una capacidad importante en la toma de decisiones y nosotros no lo vemos así. Seguramente, esta es una parte importante de por qué no decide continuar".

Es evidente que el presidente ha elegido a la dirección deportiva, compuesta por Toni Cruz y Luis Helguera, en el pulso abierto con Setién. Sin embargo, Ramírez no escatima elogios para el míster cántabro en lo referente a su trabajo en el banquillo y niega que los futbolistas estén enfrentados a Setién.

"Se genera un ambiente que nada tiene que ver con la realidad. Dicen que el vestuario no quiere al míster, hay actos de indisciplina... Todo es falso. Si un jugador le dice al entrenador lo que piensa y decide apartarlo porque lo dijo con el tono no apropiado, es problema del entrenador . Es el jefe del vestuario y Setién eso lo ha hecho muy bien. El míster ha contribuido a este tipo de fábulas porque cuando ha ocurrido algo que debe arreglar en el vestuario, es él quien lo ha dicho públicamente... El vestuario es una cosa sagrada y en su gestión diaria manda el entrenador", añadió en el programa de televisión Territorio UD.

Entre otras cuestiones, el máximo dirigente valoró la rapidez con la que Setién comunicó públicamente la no continuidad en Las Palmas, ya que en el fútbol priman los tiempos para comenzar a estructurar sin demora la próxima campaña. "Hace una semana le pedí una respuesta a la oferta que la UD le presentó por escrito para seguir trabajando en el futuro. Nos dedicamos a esto, no paramos, queremos tener claros nuestros objetivos y saber qué tenemos que hacer para conseguirlos. La incertidumbre de saber quién es el entrenador del año próximo puede parar otras gestiones. Le agradezco mucho que contestara rápidamente . No contestó a la oferta, solo dijo que no quería seguir y lo respetamos", apuntó.