El futbolista del Valencia CF Andreas Pereira fue cazado en la tarde del lunes conduciendo a 148 kilómetros por hora por la ciudad de València, donde la velocidad está limitada a 50. Este martes al mediodía, el jugador acudió a los juzgados acusado de un delito contra la seguridad vial y, tras celebrarse un juicio rápido, salió de allí condenado a la retirada del carné de conducir durante ocho meses además de pagar una multa de 3.600 euros, según la información del compañero de Levante-EMV Ignacio Cabanes.

Andreas reconoció los hechos aportados por la Policía Local de València, de hecho ya había mostrado su arrepentimiento a través de las redes sociales antes de presentarse ante el juez. Conducía su Bentley a 148 kilómetros por hora minutos antes de las cinco de la tarde del lunes, triplicando por tanto la velocidad máxima permitida en la ciudad.

Al jugador del Valencia CF le pudo salir bastante más cara la broma. En base a la Ley de Seguridad Vial y el Reglamento General de la Circulación, la infracción cometida por Andreas tiene la calificación de ´Muy Grave´ y le corresponde una sanción de 600 euros y la pérdida de 6 puntos en el carnet de conducir.

La cosa, sin embargo, no queda ahí. Al superar en más de 60 kilómetros/hora el límite permitido la infracción por exceso de velocidad pasa a ser tramitada por un juzgado contra la seguridad vial, lo que según el artículo 379.1 del Código Penal puede tener cualquiera de las siguientes consecuencias:

- Prisión de tres a seis meses

- Multa de seis a doce meses

- Trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días

- En cualquier caso, la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años

En estos casos, si no hay antecedentes es muy habitual que el juez opte por una pena de multa antes que de prisión, como así ha sido en el caso de Andreas Pereira. El mínimo previsto por la ley para personas físicas es de 2 euros al día y el máximo de 400, cantidad que fijaría el juez en función exclusivamente de la capacidad económica del sancionado.

En el caso de que se hubiera plicado la máxima sanción posible, es decir, doce meses por 400 euros al día, la cantidad a pagar sería de hasta 144.000 euros.