El Levante quiere otro delantero y hoy es el último día que tiene para traerlo. El club ha intentado no pillarse los dedos para evitar sentirse obligado, pero de aquí a que cierre el mercado no va a estar de brazos cruzados. Hay algunos que ya se han caído, pero en la mesa continúan habiendo ofrecimientos interesantes y oportunidades de última hora que podrían ser un bombazo si al final recalan en Orriols.

Al margen de Koné, la consigna de los granotas era esperarse a que en las últimas horas de mercado se pusiese a tiro alguno de los artilleros de los clubes de primera fila que no tendrán minutos y quieren jugar. Es hacia ahí precisamente a donde se dirigen las miradas.

Todo va a depender de las salidas. Tras varias semanas de negociaciones, el acuerdo para la rescisión de Sergio González se sigue resistiendo. Se trata de una guerra de nervios entre Levante y jugador en la que uno se juega tragarse a un descarte y el otro quedarse sobre la bocina sin equipo. Por ahora no hay acuerdo, ya que la cantidad a la que Sergio está dispuesto a renunciar es insuficiente para el club.

La idea del club era reinvertir el ahorro en las salidas en un último ariete. Quico Catalán no quiere salirse de la política de gasto para la primera plantilla. Por eso, si no se quita algún sueldo será muy difícil que llegue algún refuerzo. Con una ficha menor que la de Sergio, Marc Mateu está en una situación similar. También el canterano, con más años de contrato por delante, corre el riesgo de quedarse colgado. Y es que el club tiene claro que ni uno ni otro van a tener sitio aquí.

Diferente es la situación de Rafa Jordà, aunque no por ello menos importante. A Manolo Salvador se le hace muy cuesta arriba traer a otro delantero si Jordà continúa en la plantilla, ya que serían tres los jugadores para la misma posición. Varios clubes de Segunda A se han interesado, pero el Levante no va a forzar su salida. El punta catalán lo jugó todo en pretemporada hasta que se lesionó contra el Bolton y su recuperación está siendo más lenta de lo esperado, ya que ni siquiera llegó a tiempo para el Coliseum.

Pese a que públicamente no se ha pronunciado, Juan Ignacio es de los que en absoluto le harían ascos a traer más gol, pese a que acatará lo que decida el club. En este momento tiene a Aranda y a Koné en punta de lanza, además de a Jordà, y otros jugadores menos específicos como Rubén Suárez y Barkero.

El Levante tendrá que lidiar esta temporada con la ausencia de sus dos delanteros titulares la pasada, Felipe Caicedo y Stuani. Los técnicos son conscientes de que buena parte de las posibilidades de salvación pasarán por la eficacia arriba. Además, hay que tener en cuenta que a Aranda apenas se le han visto 20 minutos y que Koné sólo lleva un entrenamiento en Valencia.

Trezeguet, a Emiratos Árabes

Santa Cruz estuvo varias semanas encima de la mesa, pero económicamente los números no salían. Lo mismo pasó con Trezeguet, cuya ficha se disparaba y que ayer confirmó su fichaje por el Baniyas, un equipo de Emiratos Árabes. Atrás quedó también la aspiración de Javi Guerra, por el que el Valladolid pedía un suculento traspaso.

Sean entradas, salidas o las dos cosas, lo que parece seguro es que hoy será un día de movimientos en el que el Levante intentará quemar sus cartuchos. El mercado de enero será la segunda oportunidad si la Liga demuestra que en la plantilla hay lagunas, aunque lo ideal sería, eso sí, aprovechar al máximo los cuatro meses que todavía faltan.