Pasadas las 12 de la mañana, la expedición granota ha aterrizado en el aeropuerto de San Pablo. Sin Rubén, pero con el refuerzo anímico de las victorias encadenadas ante Celta y Sevilla, el Levante ha llegado a Sevilla dispuesto a proseguir su escalada hacia puestos europeos ante el Betis. Caparrós pone además el aliciente añadido al partido de esta noche, por su condición de enemigo público de la afición verdiblanca.

Ha sido precisamente el técnico utrerano, declarado sevillista, quien más visitas ha recibido en tierras hispalenses. Aunque la más esperada ha sido la del ahora sevillista Vicente Iborra. El exlevantinista, acompañado del pequeño Mario y su mujer, ha pasado por el hotel de concentración después de la comida y ha estado dialogando con sus antiguos compañeros, especialmente con Juanfran y Héctor Rodas. Diop es otro de los que ha aprovechado para reencontrarse con un viejo conocido.

El carácter festivo del día de mañana se ha dejado notar en la afluencia de consejeros al viaje. Al avión se han subido esta mañana, además del presidente, Quico Catalán, Francisco Fenollosa, Tomás Pérez, Ramón Vilar, Miguel Ángel Ruiz y Javi Martínez, cuyo padre, Víctor, se sumará esta tarde a la expedición.

El once, salvo sorpresa de última hora, solo presentará la novedad de la entrada de Ivanschitz en lugar del ausente Rubén. El Zhar, después de su doblete del pasado sábado, continuará en la mediapunta.