Del calor agobiante de València y Buñol... a un clima más encapotado y deseado en Holanda. La expedición, compuesta por 44 profesionales -24 jugadores, entre ellos Bardanca y Pepelu del Atlético Levante-, y con las maletas cargadas de un sinfín de material deportivo para afrontar la estadía, ha convertido el Hotel Heerlickheijd Van Ermelo en su cuartel general hasta el domingo 2 de agosto. Aunque tenía el billete reservado, Deyverson no se subió al avión. Su fichaje todavía no es oficial y desde el Levante se sigue mandando un mensaje de confianza. En Portugal se asegura que Os Belenenses está forzando para que los granotas, que ofrecen una cantidad ligeramente superior al 1,5 millones de euros, hagan efectiva la cláusula completa de 2 ‘kilos’. No está, pero se le espera pronto.
Este es el tramo más importante de la pretemporada; clave desde el prisma físico, pero, sobre todo, táctico, con el balón en actividad, para dar más pasos adelante en la fase de preparación de cara al estreno de Liga del próximo 23 de agosto en casa ante el Celta. Hay un incremento sustancial del nivel de los adversarios para evaluar la progresión del proyecto. La dificultad y la exigencia aumentan y además de inmediato. Este sábado es el primer amistoso, el cuarto de la puesta a punto, ante el PEC Zwolle (17 horas). El Bayer Leverkusen y NEC Nijmegen cierran la lista de rivales.
El Levante vuelve a un hábitat que conoce tras la experiencia vivida en 2014 con José Luis Mendilibar. El colectivo granota trabajará en una instalación que apenas dista unos diez minutos del hotel principal y que los jugadores y cuerpo técnico volverán a cubrir en bicicleta. El más veterano en Ermelo es, sin duda, David Navarro, sobre todo por su etapa en el Valencia. «Es mi séptima pretemporada en Holanda y la afronto con muchísima ilusión igualmente. Tenemos diez días con tres partidos para coger ritmo de competición y confío en que salga todo bien», afirmó el de Port de Sagunt, preparado para rendir en los dos sistemas que Alcaraz está trabajando día tras día, y consciente también de que todavía faltan piezas por encajar en la retaguardia. Hasta ese momento está el comodín del mozambiqueño Simao.
La expedición levantinista puso rumbo a Ámsterdam a las 14:30 horas. Con anterioridad, y tras una última sesión en el Ciutat, con unas temperaturas antagónicas las que más tarde se encontraron nada más pisar suelo tulipán, el grupo compartió almuerzo en Manises. Los jugadores se entremezclaron entre los pasajeros. Las dos horas de trayecto aéreo ofrecieron distintas imágenes: unos decidieron recuperar tiempo de sueño, otros escucharon música, echaron mano de la lectura o vieron una película, y los hubo también que jugaron a las cartas. Al filo de las 17:30 horas, los futbolistas aterrizaron en el aeropuerto internacional de Ámsterdam. En el exterior de la instalación les esperaba el autobús personalizado que habitualmente cubre los trayectos en Primera División, para enlazar por carretera con Ermelo. «Es el plato fuerte de la pretemporada, con partidos ante equipos más de nuestro nivel y vamos a intentar hacer una buena concentración y sacar resultados y condición física», manifestó Iván López, con menos ‘peso’ en el equipaje tras una ampliación con el final que quería.
Un grupo de chavales de un campus de fútbol sala en Cullera se dieron cita en el Ciutat de Valencia para despedir a los jugadores del Levante UD que este viernes parten, a las 14:30 horas desde el aeropuerto de Manises, en dirección hacia tierras holandesas.
Los jugadores azulgranas que se desplazarán hasta Ermelo para afrontar la segunda fase de la pretemporada que se desarrollará en tierras holandesas entre el viernes 24 de julio y el domingo 2 de agosto son:
PORTEROS: Jesús, Rubén, Javi Jiménez
DEFENSORES: Iván, Pedro, Navarro, Juanfran, Bardanca, Toño y Nikos
CENTROCAMPISTAS: Xumetra, Morales, Simao, Verza, Pepelu, José Mari, Camarasa, Jason, Rubén y El Zhar
DELANTEROS: Roger, Rafael, Víctor Casadesús y Ghilas
