El Mauricio Cuero que ahora la está rompiendo en Argentina, a quien el Levante quiere convertir en el fichaje más caro de la historia, tuvo una experiencia frustrada en Palma hace un par de años, con un exgranota en el banquillo hasta la jornada 27. El desastroso inicio de Liga en Sabadell (4-0, 18 de agosto de 2013) evidenció las necesidades y las carencias del Mallorca de José Luis Oltra. El martes siguiente llegó Íñigo Pérez para llevar la batuta del equipo, un día después fue presentado el portugués Miguel García para reforzar la defensa y el jueves 22, el por aquel entonces director deportivo y máximo accionista, Lorenzo Serra Ferrer, presenció junto al ya expresidente Biel Cerdà las evoluciones de Cuero en su primera sesión a prueba en Son Bibiloni. El ahora pretendido por el Levante tenía 20 añitos y una semana de plazo para convencer a Oltra.

En el primer contacto con los miembros de la plantilla balear, donde estaba Víctor Casadesús y el deseado colchonero Thomas Partey, el colombiano plasmó rápidamente las características que llamaron la atención a la dirección deportiva, sobre todo su velocidad supersónica, que evidenció, principalmente, cuando atacaba desde la banda derecha. «Estuvo en Palma a prueba con nosotros unos días y recuerdo que era muy rápido», afirma Víctor, ensalzando la cualidad más llamativa del que puede ser su compañero de vestuario en cuanto se abra el mercado de invierno y que está por la labora de incorporarse en diciembre para acelerar su adaptación al grupo, aunque no podría dejar su sello hasta enero.

Consciente de que sobre él estaban muchas miradas depositadas, Mauricio Cuero no escatimó esfuerzos en su examen en Mallorca. Cada vez que llegaba una y otra vez hasta la línea de fondo, recuperaba su posición con el mínimo esfuerzo. Hasta marcó un gol en su primer partidillo. «Cuero parecía un atleta de 100 metros, con una velocidad endiablada, que pegaba muy bien el balón, con mucha fuerza», recuerda el exlevantinista Oltra, actualmente colíder de la Liga Adelante al frente del Córdoba, donde también están otros ex como Héctor Rodas, Pedro Ríos o Víctor Pérez. En aquel verano de 2013, Cuero también estuvo a prueba en el Bastia francés, pero tampoco cuajó al igual que en el Vaslui rumano.

Ahora ha explotado cuando tras pasar por Olimpo recaló en Banfield. «Tácticamente tenía algunas dificultades, pero se veía que a poco que se centrara entendería los conceptos por las tremendas condiciones que tiene. El problema para que no se quedara en el Mallorca fue que teníamos la plantilla con efectivos por fuera y que además ocupaba plaza de extranjero y el cupo estaba cerrado. Nos costó bastante tomar la decisión porque nos gustaba mucho por su velocidad, porque podía rendir en varios perfiles de ataque, sobre todo arrancando por banda derecha, y por su golpe de balón», argumenta Oltra sobre el colombiano. Palma fue una parada más de un viaje con escalas sin terminar de cuajar, aunque empezaba a dejar muestras de su velocidad, esa condición que le sirvió para ganarse poco después el mote de ´correcaminos´ o ´libre´ y convertirse en un ídolo del ´Taladro´.

«En lo personal lo recuerdo como un chico educado, con ganas de hacerse un sitio en el fútbol», rememora el ex de Orriols. «No lo estoy siguiendo tanto en Argentina, pero espero que en el Levante cumpla su anhelo de dar el salto a Europa», desea. Dos años después de estar a prueba en el Mallorca, Cuero apunta a España y de granota. Las palabras de Quico Catalán en el Bernabéu tras su viaje a Argentina ratifican el deseo de la ´bala de Tumaco´ de demostrar sus cualidades en la catalogada como mejor Liga del mundo. «Cuero quiere, Banfield lo ve y a parte del jugador también. Está como loco por vestir la camiseta del Levante», destacó. Los técnicos Matías Almeyda y Claudio Vivas, el actual, han sabido explotar su velocidad y llegada de cara a la portería rival. El interés de otros clubes por la actual revelación de la Liga argentina, con siete goles, entre ellos Boca Juniors y River Plate, fue el motivo por el que Quico Catalán y Manolo Salvador cruzaron el charco la semana pasada. El OK de Cuero otorga una ventaja casi definitiva al Levante.