Hace dos semanas, Levante Fans anunciaba en redes sociales que no activaba el proceso de venta de pases de Segunda División a modo de protesta «hasta nueva orden». Con este posicionamiento, la Grada de Animación suspendía su campaña de afiliados para el curso 2016/17, achacando esta medida a las intenciones del club de instalar un control de reconocimiento dactilar a sus miembros, una exigencia que, según el Levante, venía impuesta de LaLiga. Ambas partes se emplazaron a una reunión que ya se ha producido y con el final deseado.

Tras el encuentro con el presidente Quico Catalán, la próxima semana comenzará la campaña de abonos de los más entregados del Ciutat y de la forma habitual, una vez descartado que se vayan a poner los discutidos detectores. Para reconducir la situación han sido cruciales los excelentes informes policiales que han corroborado la actitud ejemplar de Levante Fans en su andadura de tres años. El precio de los abonos es de 80 euros para los accionistas y 130 para los que no lo son y se pondrán a la venta los miércoles y viernes, de 17 a 20 horas, en las oficinas del club.