La renovación de Jefferson Lerma está encarrilada. El colombiano, que regresó a lo grande tras su última lesión, le hizo este viernes un guiño en toda regla al Levante UD en la zona mixta del Sánchez Pizjuán ante los medios desplazados para el partido contra el Sevilla: "Si el Levante quisiera renovarme para toda la vida, lo aceptaría".

Con contrato en vigor hasta 2020, el club y su agente llevan tiempo conversando para ampliarlo. Las posturas están muy cercanas y de hecho el principal escollo se encuentra en el valor de su cláusula de rescisión, ya que el presidente Quico Catalán quiere ponerle una de auténtico crack. En concreto prácticamente el doble de los 30 millones que tiene actualmente. Un blindaje que el club considera necesario en vistas a su revalorización de cara a un futuro traspaso y de su inminente participación en el Mundial de Rusia.

Preguntado en Sevilla sobre si le gustaría dejar claro su futuro antes de esa cita, Jefferson contestó que sí, pero que tampoco es algo que le quite en estos momentos el sueño. "Mi representante y el club están hablando y todo va por buen camino, creo que será pronto", dijo el cafetero. "Estoy muy agradecido y lo de menos en estos momentos es saber cuándo vamos a cerrarlo. Me quedan dos años más, tengo contrato hasta 2020 y no hay preocupaciones. De mi parte diría que sí, en estos momentos se han sentado y todo marcha muy bien".

Pese a que es cierto que el Valencia CF, no a través de una propuesta oficial, ha llamado a la puerta del Levante para interesarse por su situación, la realidad es que Lerma sólo piensa en renovar. Está muy cómodo en Orriols, agradece las oportunidades que se le han brindado aquí y ahora, en el mejor momento de su carrera, no se plantea otra cosa que no sea renovar y mantener su papel protagonista en el equipo.