La familia de la pilota valenciana respira tranquila al conocerse ayer mediante una nota de prensa emitida por la agencia EFE que Sarasol II y su hija Anna «evolucionan dentro de la normalidad de la intervención quirúrgica realizada el pasado viernes y, si no hay complicaciones, antes del próximo fin de semana ambos podrían estar en su casa».

Tras recibir la noticia SUPER se puso en contacto con la familia Sarasol y fue el propio José María, desde su habituación en el Hospital Doctor Peset de Valencia, el que quiso responder la llamada. Como no podía ser de otra forma, el para muchos mejor mitger de la historia estaba eufórico: «todo ha salido perfecto. Anna está de categoría, con todos los parámetros con normalidad y estable en todos los aspectos. Y a mí el doctor me ha dicho que soy especial y que igual mañana „por hoy„ me envía para casa. Anna estará algún día más pero es lo normal. Lo más probable es que le den el alta el fin de semana».

Aunque fatigado y todavía un poco dolorido, Sarasol II estaba ayer exultante y deseoso de compartir su alegría. «Ahora soy el hombre más feliz del mundo. No puedo pedir más. Yo le he dado el riñón a mi hija pero el que tiene la sensación de volver a haber nacido soy yo», decía.

Agradecimientos

Para concluir, el maestro quiso acordarse de los que «están siguiendo mi caso». «Solamente puedo reiterar mi agradecimiento. A los que conozco y a los que no, porque me han llegado infinidad de muestras de apoyo que nos han ayudado mucho a mi familia a mí. Nunca podré agradecerlo suficientemente», destacó Sarasol II.