El Valencia CF jugará esta noche por primera vez en el nuevo estadio del Atlético de MadridValencia CF, el Wanda Metropolitano, escenario donde recibirán a los de Marcelino con todos los honores. Si Diego Simeone califica al Valencia como «un rival directo desde el comienzo de la temporada»Diego Simeone , el club y los aficionados han escogido este partido para realizar el primer tifo desde que habitan casa nueva. Para los blanquinegros, el choque de trenes significa la ocasión de estrenar en este curso el casillero de victorias frente a cualquiera de los tres clubes que encabezan la clasificación histórica: Real Madrid, Barcelona y Atlético. Un triunfo en el Metropolitano sería la medicina perfecta para sanar una serie negativa de cuatro derrotas consecutivas entre Liga y Copa -Las Palmas, Alavés, Madrid y Barça- y, sobre todo, afrontar con el ánimo fortalecido la contienda que el jueves, a las nueve y media, puede acabar con el Valencia en una final diez años después de la última.

El once que presentará el Valencia de Marcelino ya es oficial y está formado por Neto en la portería, con Vezo en el lateral derecho y Gayà en el lateral izquierdo con Garay y Paulista como centrales. Dani Parejo y Kondogbia jugarán en el doble pivote con Lato en la banda izquierda y Maksimovic en la derecha. En el atque, Simone Zaza y Santi Mina.

Hoy en día, los blanquinegros necesitan aire: volver a despegar e ir aproximándose a los picos de rendimiento ofrecidos en los meses de septiembre y octubre. Dos semanas a cero en la Liga, y sólo nueve de los últimos 24 puntos en juego en diciembre y enero, han provocado que, especialmente, el Villarreal se haya acercado más de la cuenta alterando los límites de la tranquilidad. Esta jornada, sin embargo, ha sido trágica para los perseguidores, incluido el Submarino. Los pupilos de Calleja cayeron en el Benito Villamarín ante el Betis (2-1), el Sevilla fue humillado en Ipurua (5-1), el Madrid pinchó con el Levante (2-2) y el Celta perdió en Vitoria (2-1). Al Valencia le sobran razones en la Liga para aplazar al lunes cualquier pensamiento sobre el Barça y la Copa. Si vence al Atlético, la segunda plaza quedará a sólo un partido, la tercera se consolidará y, lo que es más importante, la diferencia con el quinto -ventaja de Champions- volvería a extenderse hasta los seis puntos.

En ese contexto, con un resultado positivo por fin en esta serie de combates contra los pesos pesados del fútbol español, los niveles de confianza en la remontada del jueves rumbo a la final crecerían más todavía. Asimismo, en pro de los objetivos deportivos y económicos de la entidad, lo de mantener a raya a los adversarios por la zona Champions es una cuestión crucial. Por todo ello, Marcelino no va a especular en el cara a cara con Simeone. Apostará por un once sumamente competitivo, ya que la tarea de dejar a cero la portería de Neto en el Metropolitano, por primera vez desde el 19 de noviembre (0-2 en el estadio del Espanyol) en la jornada 12, se presenta como una especie de ensayo perfecto para la semifinal contra Messi, Suárez y compañía. Hoy la amenaza ofensiva la conformarán Griezmann y Diego Costa. En definitiva, un Atlético que lleva toda la semana preparando a conciencia el choque y que quiere correr para desgastar a un Valencia lleno de trajín y lesiones en el inicio de año.

Marcelino respira con cierto alivio al contar nuevamente con Kondogbia en el medio y Zaza en un ataque en el que Luciano Vietto no podrá actuar por la cláusula del miedo. Rúben Vezo, que cumplió sanción ante el Madrid, repetirá pareja en la zaga con Gabriel. Garay entra mermado y Guedes, Murillo y Andreas continúan lesionados.