La presencia de Ricky Rubio en el I campus de Víctor Claver revolucionó Guardamar del Segura (Alacant). Y es que la visita de la joven estrella de los Minnesota Timberwolves puso el broche de oro a un evento que va camino de convertirse en referente, y todo con SUPER como diario oficial. Pocas veces se puede ver a dos jugadores de la NBA entrenar y trabajar con los más pequeños como sucedió ayer en Guardamar, donde los 110 niños con los que cuenta el campus disfrutaron de una jornada muy especial con los internacionales españoles.

Por cierto pese a las bajas, ambos creen que España tiene equipo suficiente para gana el Eurobasket. «Tenemos algunas ausencias, es cierto, pero podemos seguir aspirando a los títulos», indicó Rubio.