Amí, todo ese rollo de las acciones me da igual. Yo lo único que quiero es ver al equipo ganar cada fin de semana». Esta frase, que a buen seguro hemos escuchado todos los levantinistas, es un cáncer. El origen del problema. Porque, contra lo que a buen seguro, de manera inocente, cree quien la afirma, ambas cosas están estrechamente relacionadas.

La salud de una institución depende de la voluntad de sus miembros de implicarse honestamente, de no mirar para otro lado, porque eso no es más que una garantía de pan para hoy (la pseudotranquilidad de vivir con los ojos cerrados) y hambre para mañana.De vecinos y barbas

No hay que irse muy lejos para encontrar el ejemplo. Porque se puede haber estado jugando la Champions esta temporada y tener un futuro preocupante enfrente, en forma de cientos de millones de euros de deuda, pleitos abiertos de dudoso final feliz a nivel económico, y la propiedad del club en manos extrañas y totalmente ajenas al sentimiento del aficionado.

Y la culpa de eso no es del señor de Singapur, para quien el Valencia CF no es más que un intento de negocio. La culpa es de todo aquel (empresario, periodista, etc.) que ha preferido mirar para otro lado pensando que las cosas ya se arreglarían solas, si eso.

Pero eso no pasa. Porque, si como le dijo el profesor Sweeney a Derek Vinyard en American History X, nos hacemos las preguntas correctas, obtendremos las respuestas verdaderas. Los problemas hay que afrontarlos, no esperar a que se evaporen por arte de magia. Y en el Levante UD hay que estar ojo avizor, porque es fundamental saber lo que pasa en el club para poder abortar los problemas en el momento en que se produzcan. Es decir, antes de que sean difícilmente remediables.

Obviamente, tal y como le dije al bueno de Jordi Gosálvez (Onda Cero) minutos después de que Quico Catalán anunciase el adelanto de las elecciones a la presidencia para este mes de diciembre, el FROG, la asociación de accionistas del Levante UD no va a presentar ningún tipo de candidatura alternativa. Sería de una torpeza supina por dos motivos. El primero, porque pese a nuestras discrepancias con el actual presidente, su gestión nos parece más que buena, notable. Y el segundo porque, con el 69,04% de las acciones en manos de una Fundación herencia de la creada con patronos puestos a dedo por el propio Catalán, hacerlo sería una evidente pérdida de tiempo.

Situación viciada

No obstante, que nadie olvide que estamos ante una situación viciada, en la que una Fundación creada como elemento meramente transitorio para arrebatarle las acciones a Pedro Villarroel y, en teoría, reintegrarlas al levantinismo, se perpetúa en el tiempo para beneficio de aquellos a quienes más interesa el statu quo: el actual Consejo de Administración.

El Levante UD, a día de hoy, ni es democrático ni transparente, y eso no va a cambiar fingiendo que no pasa nada. La directiva teme la crítica con pavor, y tiene auténtico pánico a que alguien ajeno a la cuerda pueda entrar en el Consejo o la Fundación, lo cual no tiene sentido ninguno si todo es tan maravilloso como se pinta.

Por eso es importante que haya quien haga las preguntas, por eso el FROG tiene más sentido que nunca, y por eso necesita el apoyo de los accionistas que quieren lo mejor para el Levante UD. Porque todo gran poder necesita quien lo vigile para evitar que pierda el norte. Porque tu voz, granota, tiene tanto derecho como la de cualquiera a poder ser escuchada.

*Sin Tregua, además de radiar todos los partidos en competición oficial que disputa el Levante UD, se emite en directo en la 97.7 Radio Levante de lunes a jueves de 20:00 a 21:00 y de 23:00 a 00:00 en redifusión.