Triunfo sufrido del Valencia, que también vale. El Eibar siempre es un rival rocoso, sus características pasan por no dar nada por perdido, saben presionar y se desdobla bien por banda. En la segunda parte, el equipo de Mendilibar adelantó 15 metros sus líneas e hizo méritos para conseguir el empate, sin alardes, sin grandes ideas, con el Valencia excesivamente replegado -buscando el error no forzado- y Jaume siendo figura. Los tres puntos vienen muy bien, el equipo arranca el año ganando y permite ver a futbolistas que se han recuperado. Toca seguir creciendo y siempre es bueno trabajar para mejorar con un triunfo. El Valencia necesita sí o sí un plan B. Parejo sabe que lo van a marcar, pero es bueno liberarlo a través de una alternativa de juego y de jugada.

Hay un equipo que se recita prácticamente de memoria. Diakhaby puede alternar con Garay en línea defensiva, pero los demás son hombres conocidos. El doble pivote Coquelin-Parejo se desenvuelve cada vez mejor. Son dos futbolistas fundamneteles en este Valencia, como la sociedad Maxi-Rodrigo. Parece que llevan tres o cuatro años jugando juntos, se entiende a la perfección. Maxi marcando los tiempos en la zona de contundencia, que es la boca del área, y Rodrigo tirando los desmarques espectaculares; cada vez entiende mejor el juego.

Me ha gustado mucho la pareja lateral Wass - Ferran. Quizá a Soler le faltó algo más de profundidad; quien si estuvo bien es Gayà, que dobló mucho por su lado y está en un momento físico que le permite ser opción permanente en ataque. La jugada del 1-0 fue muy buena, desde la distribución y el criterio de Parejo para darle amplitud al campo. Fue clave Daniel Wass. El danés puso un muy buen balón. Cuando le levantan esos centros, Maxi no tiene comparación por remate de cabeza, por físico, por envergadura, por posicionamiento. El uruguayo lo solucionó todo con un cabezazo. La amplitud del campo se hace efectiva con el desdoble de los laterales, que deben pasar gran parte del partido en tres cuartos de campo rival. Se vio con Wass y Gayà.