Adiós a las pelusas del radiador: el producto para el pelo que debes utilizar para limpiarlo por dentro

Esto es lo que tienes que hacer

Radiador

Radiador

No hay quien se atreva a estar alturas del año a salir de casa sin una chaqueta algo más abrigada por si comienza a refrescar de repente. Sin embargo, el enemigo no solo puede acavar fuera de casa. Cuanto antes nos pongamos manos a la obra con la preparación de la estancia de cara al frío, más problemas nos ahorraremos a la larga.

Aislamiento de puertas y ventanas, cambio de armario, colocación de las alfombras... Son muchas las tareas que tenemos que listar para ir llevando a cabo a medida que avanza el otoño con vistas a los meses más fríos del año, que no tardarán en llegar.

El mejor aliado para estos días de temperaturas tan cambiantes ya comienza a ser el radiador. Es importante que cuentes con una instalación a punto para que cualquier incidente no te pille desprevenido y tengas que pasar los peores días sin un rincón al que arrimarte para calentar el cuerpo.

Atención, porque incluso la distribución de los muebles puede afectar a cómo las corrientes de calor circulen por la casa. Haz una distribución de los muebles inteligente y asegúrate de que ninguna fuente de calor está obstruida. Si, por ejemplo, tienes el sofá puesto justo delante del radiador del salón, el calor no llegará hasta la otra punta de la estancia.

Si dejas el radiador al aire, sus defectos saldrán en seguida a la luz. Cuando la instalación es nueva, su color suele ser de un blanco reluciente que suele ir perdiendo brillo a medida que pase el tiempo. Estos elementos repartidos por toda la casa no son inmunes a la acumulación de polvo o a las manchas, ni por delante ni por detrás. De hecho, la parte que suele quedar pegada a la pared es la que suele acumular mucha más suciedad, lo que incluso podría terminar afectando a su funcionamiento.

La parte que tampoco se libra son los cubículos interiores del radiador. Eso sí, sacar la suciedad de esta zona será mucho más complicada y necesitarás ingeniártelas de alguna forma para dejarlos impolutos, ya que desmontarlos es totalmente imposible.

Un secador para sacarnos del apuro

Hay un producto que te sacará del apuro y que podrás encontrar en tu cuarto de baño. Por mucho que te sorprenda, este sesencial lo podrás encontrar en cualquier casa, sobre todo de cara al invierno. Tu secador de pelo podrá hacer mucho más que secar tu cabello de cara a no coger un resfriado este invierno.

Enchúfalo cerca del radiador y ponlo a máxima potencia y con el aire frío entre los huecos de tu instalación. Antes, es importante que pongas algún trapo para que coja todo el polvo posible. Podrás comprobar cómo, a medida que lo pasas de arriba a abajo, las motas van saliendo.

De paso, aprovecha para pasar una mopa plana por la parte de atrás para sacar el polvo restante al que no puedas llegar con tu secador. Por último, te quedará la cara visible por sacar partido. Pasa una bayeta húmeda con agua y jabón y después seca la zona con un paño para que quede brillante.